El negocio más allá de las ganancias
No cabe duda de que el mundo de los negocios ha venido cambiando vertiginosamente, empujado en gran medida, por la Cuarta Revolución Industrial (Industria 4.0).
Las tendencias nos muestran que los líderes empresariales están asumiendo una visión con un enfoque más social que dicta que las empresas deben servir a sus clientes, a los empleados, a los proveedores y a las comunidades, además de a sus accionistas.
El estudio que recién dio a conocer Deloitte en el contexto del Foro Económico Mundial, realizado en Davos, confirma esta evolución pues encontró evidencias de que la mayoría de las empresas en el mundo se esfuerzan por hallar un equilibrio entre su propósito y su rentabilidad.
Casi seis de cada diez ejecutivos dijeron que aumentar el impacto positivo de sus empresas en la sociedad estaba entre sus cinco principales. La creciente atención de los ejecutivos a los propósitos puede atribuirse, en gran medida, a una mayor presión de los grupos de interés internos y externos.
Y ese es el camino a seguir pues la responsabilidad que las empresas deben asumir para con la sociedad es uno de los principales diferenciadores en esta Cuarta Revolución Industrial.
La sociedad tiene una expectativa mucho mayor y República Dominicana no es la excepción, el futuro de la economía en la región y sus empresas, está vinculado a la rápida transformación bajo este nuevo esquema.
La tarea no es fácil, pues seguir esta ruta de una forma exitosa, requiere que los líderes comprendan esta responsabilidad y ofrezcan soluciones que van más allá del crecimiento empresarial, hablamos del progreso social.
El estudio muestra que a medida que las empresas enfrentan estas nuevas realidades, los líderes están reevaluando también sus enfoques en cuatro áreas clave para la Industria 4.0 y al tema del impacto social se suman: estrategia, talento y tecnología. Y lo menciono para llamar la atención sobre el tema de las tecnologías de la Industria 4.0, pues, aunque son capaces de alterar radicalmente industrias enteras, los ejecutivos, en el mundo, no están adoptando plenamente una mentalidad disruptiva.
Solo el 17% de ellos dijo que hacer inversiones efectivas en tecnología de la Industria 4.0 era una prioridad organizacional, ocupando el lugar más bajo entre otras 12 prioridades.
El autor de este columna es Socio Consultoría Latinoamérica de la firma Deloitte.