Alertan sobre impacto de la crisis del agua

La escasez de agua en el mundo está incrementando la problemática social y económica, convirtiéndose en un riesgo global latente del que más de 2,100 millones de habitantes del planeta ya están siendo afectado.

En República Dominicana, la Oficina Nacional de Meteorología (Onamet) emitió una declaración de “Sequía meteorológica” debido a los bajos registros pluviales del primer trimestre del 2019. Desde noviembre pasado y hasta finales de marzo,el país atraviesa una “sequía estacional”, época en la cual las lluvias se hacen escasas en algunas partes del territorio, sobre todo en la franja sur.

La escases hídrica está posicionada entre los primeros lugares por su nivel de impacto a escala mundial, según expertos del Informe Global de Riesgos 2019, publicado este año, por Marsh & McLennan Companies en colaboración con el Foro Económico Mundial.

La generación de energía, la cadena de valor alimentaria, así como industrias relacionadas a la manufactura, vestido y agricultura, son las principales perjudicadas ante la inminente crisis del agua. La operación de estos sectores se vería afectada incluso en su etapa más básica, lo que provocaría afectaciones a la salud, así como desestabilización social y económica en todos los niveles.

“Es conveniente que las empresas y organizaciones incluyan procedimientos innovadores e implementen mejores prácticas, a través de un plan de acción que mitigue cualquier situación cercana que ponga en riesgo su prevalencia”, agrega Enrique Valdez, presidente de Marsh Franco Acra, pues la demanda mundial de agua irá aumentando a un ritmo de alrededor del 1% anual como ha ocurrido en las últimas décadas en función del aumento de la población, el factor económico y los cambios en los patrones de consumo.

La oficina de Meteorología alertó que para los próximos meses los pronósticos vaticinan acumulados de lluvias por debajo de lo normal, y proyectó que en las regiones con situación más crítica, podría seguir empeorándose la situación. Diferentes sectores afectados ya han tomado medidas de racionamiento de agua potable en las regiones norte y sur del país, ya que hay zonas en la que no ha llovido por más de 15 meses,

Las interconexiones a raíz de esta crisis, son muchas y variadas, entre las que destacan la migración forzada, las crisis alimentarias, e incluso afectaciones a nivel global como podría ser la propagación de enfermedades por no contar con los recursos hídricos suficientes para evitarlo, lo que perjudicaría a diferentes sectores sociales y empresariales incitando a la inestabilidad social.

“Aún estamos a tiempo de neutralizar este impacto, pero se requiere sobre todo la ayuda de los gobiernos y las empresas. Estas últimas deben comenzar a concientizar y crear planes proactivos alentando hacia una cultura de prevención que contribuya a la continuidad de sus operaciones y para poder mitigar la crisis del agua que se presentará en el mundo si no se ponen en práctica acciones desde hoy.” comentó Gerardo Herrera Perdomo, Risk Consulting Latin America Managing director en Marsh & McLennan Companies, en Marsh.

De igual forma, el aumento en el precio del agua representa un riesgo de alta probabilidad a corto plazo para el país y a nivel global, que marcará aún más la división entre sectores de la sociedad, por lo que, incluir dentro de las políticas corporativas y públicas acciones que generan un cambio positivo para el medio ambiente sumarán a la estabilidad en general