REPORTAJE
Una mano amiga para las sureñas
IMPULSO A LAS MUJERES DEL SUR
Desde su creación en noviembre de 2001, la Fundación Sur Futuro ha asumido como prioritarias diversas áreas de trabajo que incluyen la protección del medio ambiente, el desarrollo sostenible y el apoyo a la mujer como sector vulnerable de la sociedad. Esta última, como otros segmentos, se ha desarrollado de manera persistente y ha visto sus frutos.
En cada una de las acciones de trabajo, la Fundación promueve con un marcado énfasis el enfoque de género, como una manera de respaldar la participación activa y el desarrollo de las mujeres con ejecutorias que buscan reducir la brecha de género existente. Con esto se pretende impulsar un desarrollo incluyente y equitativo, donde las mujeres sean protagonistas junto a los hombres de sus comunidades.
Perspectiva de género
Una de las líneas transversales de la Fundación Sur Futuro es el género. La entidad considera que para mejorar la condición de las mujeres, las acciones deben ir orientadas a enfrentar su estado material, compuesto por la pobreza, la falta de educación y capacitación, la carga de trabajo excesiva, desnutrición y la restricción del acceso a la tecnología moderna. Además, equilibrar su ubicación social y económica con relación a los hombres, en términos de diferencias salariales y de oportunidades de empleo, pues existe mayor vulnerabilidad en las mujeres hacia la pobreza y la violencia, y sobre todo, se mantienen oportunidades diferenciadas a la propiedad de recursos productivos y al poder político.
Beneficios de Sur Futuro a la mujer
Ante la brecha en la condición de género que persiste en la sociedad, Sur Futuro ha enfocado sus proyectos en el desarrollo social de las mujeres pobres y en condiciones vulnerables de la Región Sur, con el fin de que puedan mejorar su condición de vida; su nivel de educación formal y su formación para el trabajo, con programas de salud, acceso a las tecnologías, al crédito y al autoempleo, y con acciones afirmativas que equilibren la distribución del poder y mejoren su autoestima.
Estos proyectos se han distribuido en la alfabetización, educación para el trabajo, formación en tecnologías de información, operativos para la prevención y detección del cáncer de mamas y enfermedades de transmisión sexual (ITS/VIH/SIDA), fortalecimiento de organizaciones de mujeres; proyectos que contribuyan a reducir el tiempo de trabajo doméstico, energía renovable al alcance de las mujeres y generación de ingresos.
Dentro del programa de microcréditos, Sur Futuro ha priorizado los financiamientos para mujeres. En la actualidad, más del 60% de los créditos son concedidos a emprendedoras, y en los últimos 10 años se han otorgado más de RD$175 millones a más de 4,000 mujeres para que desarrollen iniciativas productivas como colmados, venta de accesorios de fantasía, salones de belleza, invernaderos, sistemas de riego, entre otras, en beneficio de las mujeres de las provincias más pobres del país, tales como Azua, Bahoruco, San Juan, Independencia y Barahona.
La entidad afirma que a través del proyecto Siembra Saber, fueron alfabetizadas en las regiones Sur y Este más de 7,000 mujeres, y recientemente en el marco del “Proyecto Quisqueya Aprende Contigo”, en los municipios de Las Yayas, Padre Las Casas y Guayabal, en Azua, Sur Futuro capacitó a más de 3,000 mujeres que están asumiendo la educación como un proceso a lo largo de toda la vida.
También, con la colaboración del Despacho de la Primera Dama, se ha logrado atender a más de 355 mujeres de 10 comunidades aisladas del Sur, para la detección temprana del cáncer de mamas y la atención de los casos que han resultado positivos, y más de 5,000 mujeres de baja escolaridad y residentes en Bateyes han sido sensibilizadas en torno a enfermedades de transmisión sexual (ITS/VIH/SIDA) en alianza con organismos especializados.
En las acciones positivas de los proyectos, las capacitaciones técnicas en temas agropecuarios son dirigidas a la familia, para garantizar que el conocimiento no se concentre solo en los hombres, todos los programas de créditos deben tener como clientes un mínimo de 50% de mujeres.
Asimismo, el proyecto Sur Solar, ejecutado por Sur Futuro con el financiamiento de la Unión Europea, ha permitido que 508 hogares en comunidades de montañas del Sur, sin acceso a la energía eléctrica del sistema, la reciban a través de sistemas solares. Este proyecto también ha contribuido a mejorar la salud de esta población, a través de la construcción de más de 1,000 estufas limpias de leña, pues les permite consumir menos de la mitad de la madera que antes tenían que cargar para cocinar.
Mujeres rurales del futuro
María Estela Díaz y Eduvirgen Ramírez, de 45 y 46 años respectivamente, forman parte de un grupo de mujeres de Azua que son las únicas microempresarias de la provincia.
Desde 2014, María Estela y Eduvirgen son beneficiarias del proyecto “Mujeres rurales del futuro”, que busca mejorar la condición social de las que se encuentran en situación de vulnerabilidad, a través del desarrollo de medios de vida sostenibles.
Ambas mujeres, pertenecientes a la organización “Amor y paz”, de la comunidad de La Siembra, cuentan con un invernadero de 1,200 metros cuadrados, para la producción de ajíes. Antes de pertenecer a la Red de Invernaderos para las Mujeres, María Estela Díaz, de cuatro hijos y cinco nietos; y Eduvirgen Ramírez, de cuatro hijos y cuatro nietos, eran amas de casa y ayudaban a sus esposos en la agricultura.
“Sur Futuro nos contactó a través de la organización Amor y Paz, para que nosotras seamos beneficiarias de este proyecto. Hemos mejorado nuestra calidad de vida”, afirman.
Destacan que en 2015 su cosecha de ajíes fue de un promedio de 11 libras por planta, para una cantidad de 49,122 libras. Actualmente, en este segundo ciclo de producción está proyectado que cortarán 14 libras por plantas, otro record de producción para un invernadero en Padre las Casas.
Sur Futuro también señala que diversos productores han elogiado la labor de estas mujeres, bautizándolas como “mujeres manejando invernaderos”, a razón de que son más dedicadas al momento de trabajar.
Promoción de las mujeres rurales
A raíz de los proyectos de Sur Futuro, ha notado una mejoría económica sustancial entre las beneficiarias. Esto ha contribuido a movilizar la economía comunitaria con empleos fijos y temporeros, y la economía de escala que se desarrolla alrededor de la actividad productiva. De igual manera, han podido generar ingresos suficientes para mandar a sus hijos a estudiar en universidades de Santo Domingo.
Sur Futuro considera que cuando las mujeres empiezan a tener ingresos y una ocupación, cambia la forma en que la percibe su pareja y la comunidad en general. Esto produce una mejoría en su posición de género y su ubicación social, en adición de que promueve un incremento de su autoestima. Además de una mejoría general para la familia y sobre todo, se constituyen en un ejemplo para las demás mujeres, en especial para las niñas y adolescentes que ven un patrón diferente y un modelo a seguir.
En definitiva, esto irá reduciendo la brecha de género que tanto daño provoca en el país.
(+) MEJORÍA DE LA CONDICIÓN DE GÉNERO EN EL CAMPO El Programa Mujeres Rurales del Futuro, patrocinado por la Philip Morris Dominicana, se enfoca en la estrategia de financiar empresas agrícolas, que son seleccionadas por las organizaciones sociales de la comunidad.
Estas agroempresarias cuentan con un acompañamiento social y técnico de incubación, que las dejará en capacidad de manejar, administrar y comercializar efectivamente.
El programa incluye un proceso de sensibilización de género a nivel de organizaciones comunitarias, las beneficiarias directas con sus familias y a profesores y profesoras de la escuela de la comunidad, enfocado en viabilizar los derechos de la mujer y la reducción de la violencia de género. Uno de los lineamientos de este programa es que podrá mejorar la condición de produclas participantes al aumentar sus ingresos, sus conocimientos y darles la posibilidad de mejorar las necesidades básicas de sus familias.
Esto ha traído como resultado una red de comercialización con los cuatro proyectos ejecutados bajo este programa. La red es una alternativa de comercialización con volúmenes aceptables de producción para que así las mujeres tengan poder de negociación al momento de vender su producción. Dentro de esta plataforma se encuentra una extensión de 3,750 metros cuadrados de invernaderos. Esta red está conformada por las beneficiarias del programa y otros productores independientes.
En la actualidad, la producción obtenida se vende en supermercados de Azua, Santo Domingo, en el Merca Santo Domingo, a empresas exportadoras y el resto de los rubros agrícolas a intermediarios locales.