CON EL SUDOR DE SU FRENTE
Creatividad más allá de lo económico
Para Ramón Stalin Salcedo Torres su trabajo es un modo de vivir del arte que lleva dentro que es popular y folclórico.
Quizás para muchos, el arte es una profesión poco relevante. Pero para Ramón Stalin Salcedo Torres, es la combinación cultural con la forma de buscar ingresos, pasión y trabajo a la vez, inspiración y vocación. Salcedo Torres cuenta que desde pequeño tenía la necesidad de ser alguien útil, razón por la que “correteaba” por los talleres de Felipe Abreu, del Maestro Bule y de Doña Mecho, personalidades importantes del pueblo y los considera sus maestros, porque la motivación fue su fuente principal de aprendizaje. Desde muy temprana edad comenzó a trabajar en una sastrería que le facilitó aprender el arte de dibujar, diseñar y confeccionar. En sus inicios, Chanina solo confeccionaba trajes para la fiesta carnavalesca, que luego de utilizados por los personajes, los vendía a turistas interesados en su confección. Unos quince años atrás, creó “El Diablo Cojuelo Vegano” que lo inserta en la artesanía. Revela que esta le demostró que es un buen negocio para expandirse en otros mercados. Sus compueblanos le dicen ser: “El artista de la miniatura”. El mes de febrero es en el cual sus fabricaciones se muestran con más esplendor, pero desde inicios de marzo empieza a trabajar para hacer un buen diseño. Decidió inscribirse en la Universidad Tecnológica del Cibao (Ucateci) para reforzar su modo de producción, realizando un técnico en mercadeo. Chanina dice que si algo le ha ayudado es la humildad que asegura poseer, así como el equilibrio social al relacionarse con el rico y el pobre. Precios Particularmente los trajes de carnaval oscilan entre RD$10,000 y hasta 30,000 dependiendo las herramientas y los accesorios con que hayan sido creados. El traje más costoso realizado por Chanina está valorado en RD$80,000; pieza que fue donada luego de pasadas las fiestas. El costo de las artesanías y souvenires, creación del trabajador, dependen del material, la idea, la calidad, el producto y la temporada. EmpoderamientoChanina resalta que el gobierno dominicano debe darles un empuje a los encargados culturales del país, ellos muestran las costumbres de la República, mientras el turista es una parte esencial y consumidor que generará mayores ganancias para los vendedores y el país. Carnaval VeganoEn una encuesta realizada por la Oficina Nacional de Estadísticas (ONE) en 2009, los veganos aportan el 6% del Producto Interno Bruto (PIB). Un ensayo de Dagoberto Tejeda muestra que en la celebración del año 2007 se invirtieron RD$167,000,000.00. Tejeda indicó que el mayor aporte corresponde a los carnavaleros, con unos RD$72,000,000.00, lo que se traduce en un 43% del monto total invertido. El 10% de los gastos de los grupos son obtenidos de su propia comercialización y el 3.60% de los aportes los hace el Comité Organizador del Carnaval Vegano (Cocave).
((IngenioEscenifi ca personajes en miniatura Sus ganas de aportar más al arte de su comunidad hacen que cree el auténtico “Diablo Cojuelo Vegano” en miniatura y de esta manera también se introduzca al mundo artesanal. Recuerda con una sonrisa que esta idea fue la primera composición en La Vega, por lo que le causó el “boom”, además de ser la más emblemática hasta el momento. Aun así no se ha comercializado con los demás países pero espera que en un futuro se pueda hacer. Entre sus creaciones también se encuentran el Lechón de Santiago, El Guloya de San Pedro y Roba la Gallina. Es el responsable de la creación de la imagen de la Virgen de Las Mercedes, comercializada como souvenir a todos los visitantes de la población por un costo de RD$3,000.