MACROECONOMÍA
Petrocaribe: Acuerdo de beneficios para todos
MINISTRO DICE TRANSACCIÓN NO ES FIN DEL ACUERDO
Las negociaciones que se produjeron entre el gobierno dominicano y la empresa de la República Bolivariana de Venezuela, PDVSA, para saldar la deuda de República Dominicana con dicha empresa, en el marco del Acuerdo Petrocaribe, constituyen una magna operación, tanto por su alcance, como por los beneficios y logros que representa para ambos gobiernos y pueblos. Sobre todo para la parte venezolana, si tenemos en cuenta el momento de dificultad y crisis económica que atraviesa el hermano país, debido a la drástica caída en los precios del petróleo en los mercados internacionales, siendo éste la principal fuente de recursos para su economía. El viernes 30 de enero, las autoridades del Ministerio de Hacienda dieron a conocer al país el cierre de las negociaciones con la empresa estatal venezolana PDVSA, mediante las cuales fue saldada la deuda que tenía el país, generada por el Acuerdo de Petrocaribe, y ascendente, al 31 de diciembre del 2014, a US$4,123.8 millones. No es la primera vez que la empresa PDVSA realiza operaciones de esta naturaleza con países beneficiarios del Acuerdo Petrocaribe, pues en el 2012 el gobierno del presidente Pepe Mujica autorizó a la empresa uruguaya ANCAP a saldar la totalidad de su deuda con PDVSA por US$828 millones, con un descuento del 37.6%, mucho menor al obtenido por nuestro gobierno, del 52%. Para la realización de esta transacción de manejo de pasivos, el gobierno dominicano y PDVSA conciliaron y aprobaron un monto de US$4,027.3 millones, equivalentes al 98% de la deuda total. Luego de realizar esta transacción, a la fecha, la deuda con PDVSA se redujo a US$96.5 millones de dólares. Una vez cumplidas nuestras obligaciones, en lo fundamental, el acuerdo sigue en plena vigencia, facilitando el financiamiento parcial del petróleo venezolano que recibimos, y su intercambio por bienes y servicios dominicanos, a plazos convenientes y con intereses muy bajos. Así República Dominicana puede saldar el resto de la deuda pendiente a través de la exportación de bienes de origen agropecuario, como son las habichuelas negras, o mediante servicios de hotelería y turismo, lo que constituye el mejor testimonio de la continuidad del acuerdo bilateral, y un desmentido a quienes han afirmado que Petrocaribe ha llegado a su fin. En los últimos años en el mercado del petróleo, la mayor parte de la deuda acumulada por República Dominicana con PDVSA, tenía una tasa de interés de 1%; con un plazo de repago de 23 años y dos años de gracia (para un plazo total de 25 años). Es importante notar que, si bien el plazo nominal de la deuda es de 25 años, este es un préstamo que empieza a amortizarse luego de dos años de gracia, por lo que el plazo efectivo promedio, es de 11.4 años. Esta transacción se hizo bajo el amparo legal de la Ley de Crédito Público y de la Ley de Deuda Pública 2015, aprobada por el Congreso Nacional, que autoriza tanto la emisión de bonos para financiar el presupuesto, como la emisión de bonos para operaciones de manejo de pasivos que tengan como objetivo reducir el monto y/o servicios de la deuda externa e interna del sector público no financiero. El proceso de negociaciones que acaba de concluir se inició con la colocación más exitosa de bonos soberanos que ha realizado República Dominicana en su historia, la cual cerró el pasado martes 20 de enero. El ingreso de los recursos provenientes de esta colocación, ha sido utilizado, en gran parte, para pagar de forma adelantada el 98% de la deuda acumulada con PDVSA, a diciembre del 2014. El martes 27 de enero se cerró la transacción financiera mediante la cual se redimió de forma adelantada la deuda de US$4,027 millones de dólares acumulada con PDVSA, mediante el pago de la suma de US$1,933 millones de dólares. Esto equivale a un descuento obtenido sobre el valor inicial de la deuda de un 52%, o de forma equivalente, que se pagó un precio de 48% por la deuda. Reducción de Deuda PúblicaUn beneficio importante de la operación con PDVSA es que la Deuda del Sector Público No Financiero se ha reducido en un monto de US$2,094 millones, equivalentes a 3.3% del PIB, y a más de RD$90,000 millones. Otro notable beneficio de la operación es el plazo promedio de la nueva deuda, el cual se extiende ahora a 19.7 años, en lugar del plazo promedio de 11.4 años de la deuda con PDVSA. Estos dos indicadores serán muy bien vistos por los inversionistas internacionales, los organismos multilaterales y por las calificadoras de riesgo, lo cual, en términos prácticos, va a redundar en una reducción de la tasa de interés con la cual se financie el país, de ahora en adelante. En adición, República Dominicana estaría pasando a ser un emisor sofisticado con capacidad para realizar operaciones de manejos de pasivos para montos considerables, en los mercados financieros internacionales. La percepción de riesgo- país va a mejorar, y esto va a permitir al país reducir su costo de financiamiento. Aunque la nueva deuda va a pagar una tasa de interés superior (1% vs. 6%), la transacción permite lograr un ahorro en valor presente superior a los US$550 millones. El servicio total de la deuda (intereses más amortizaciones) disminuye. En términos ilustrativos, por ejemplo, en los próximos diez años el servicio anual promedio de la deuda con PDVSA sería de alrededor de US$205 millones, mientras que el servicio de la nueva deuda sería de alrededor de US$120 millones. La transacción se diseñó para que el servicio total (intereses y amortización) de la nueva deuda sea inferior al servicio de la deuda con PDVSA. Es decir, en términos nominales, el país tiene un ahorro en valor corriente, por un monto superior a US$100 millones. Beneficios para VenezuelaEsta transacción también conviene a PDVSA. Esto así, porque PDVSA está consiguiendo un monto líquido de US$1,933 millones, lo que equivale a haber descontado la deuda de República Dominicana a una tasa de 9.5%; la cual es muy inferior a la tasa a la que podría levantar ese monto actualmente en los mercados financieros, que, en algunos casos, supera el 20%. Es decir, PDVSA ha conseguido un financiamiento de casi US$2,000 millones a una tasa de descuento inferior a 10%. En los momentos actuales por los que atraviesa la economía venezolana, sometida a los embates de los bajos precios del petróleo, y una implacable guerra económica de sus enemigos, este aporte dominicano llega con la mayor oportunidad. Con ello nuestro gobierno ha hecho un explícito gesto de reconocimiento y gratitud a quienes nos han acompañado solidariamente, durante todos estos años. Finalmente, queremos resaltar la total transparencia con que nuestros gobiernos realizaron esta transacción financiera, sin necesidad de intermediarios privados, lobbystas, ni el pago de elevadas comisiones espurias a cabilderos que viven de la especulación y el oportunismo. De esta manera se ha sentado un importante precedente que ha de redundar en una política internacional más defensora de los intereses y recursos del pueblo dominicano, y más orientada a satisfacer sus necesidades mediante un uso escrupuloso y racional de los bienes de la nación.