RECURSOS
Guisando la pobreza con leña y carbón
SAN JUAN Y ELÍAS PIÑA REGISTRAN EL PORCENTAJE MÁS ALTO DEL PAÍS EN EL USO DE COMBUSTIBLES SÓLIDOS EN LA COCINA
Dime con qué cocinas y estimaré cuán desheredada de la fortuna eres. Un fogón hecho con tres piedras sobre la tierra, con leña como combustible para preparar los alimentos, es una estampa todavía usual en el país, principalmente en zonas rurales afectadas por una pobreza tan arraigada que deja pocas alternativas para preparar la comida que aparece. Ante esa situación echan mano a lo que les resulta asequible y menos costoso: la leña y el carbón. Una comparación de las estadísticas de pobreza (monetaria) y el consumo de combustibles sólidos, revela que en la medida en que la pobreza toca a un mayor número de hogares en un determinado territorio, se incrementa la cantidad de familias que utilizan fogones y anafes para cocer los alimentos. La Encuesta Nacional de Hogares de Propósitos Múltiples 2011 (ENHOGAR 2011) arrojó el siguiente dato nacional: en 17 de cada 100 viviendas utilizan para cocinar combustibles sólidos -leña, el 12.3%, y carbón, el 4.7%, siendo la pobreza urbana de 36.5%, y la rural, de 48.4% (porcentajes elaborados a partir de la Encuesta Nacional de Fuerza de Trabajo ñENFT- de 2011). Un dato más reciente, aportado por la Encuesta Nacional de Inmigrantes (ENI 2012), reveló que el 72% de los hogares de los nacidos en Haití que se encuentran en la zona rural dominicana utiliza combustibles sólidos para cocinar (el 39.9% emplea carbón y el 32.0%, leña). ¿Acaso ese dato evidencia que son los más pobres entre los pobres? Predominio de la fronteraENHOGAR 2011 ofrece información de dónde el uso de leña y carbón tiene predominio, mientras que ENFT 2011 permite ubicar geográficamente la pobreza. En las provincias Bahoruco, Independencia, Pedernales y Barahona -que conforman la región Enriquillo-, el porcentaje de viviendas que utilizan leña para cocinar es del 23.17%, y carbón, el 17.07%, para un 40.24%. Resalta que el mayor consumo de carbón se localiza en la región que tiene la pobreza más alta del país, con el 61.4%. En Elías Piña y San Juan, que conforman la región El Valle, el 39.51% de las familias utiliza leña y el 5.44%, carbón, para un 44.95%. Al revisar los datos de pobreza se observa que en esa región alcanza al 59.1% de su población. A estas provincias siguen Valverde, Santiago Rodríguez, Monte Cristi y Dajabón, localizadas en la región Cibao Noroeste, y cuya pobreza se estimó en 59.3%, el consumo de leña es de 14.26% y de carbón de 10.31%, para un 24.57%. Otras provincias que arrojan un elevado consumo de leña y carbón son Monte Plata, Hato Mayor y San Pedro de Macorís que conforman la región Higuamo (en donde existe un predominio de los bateyes). Con una pobreza del 48.6% de su población, el consumo de leña para cocinar fue de 15.02%, y el de carbón, de 10.20%, para un 25.22%. En la región Valdesia, compuesta por las provincias San José de Ocoa, Azua, Peravia y San Cristóbal, la pobreza alcanza al 49.1% de su población, mientras que el consumo de leña asciende al 15.71%, y de carbón, a 6.07%, para un 21.78%. Ozama, Cibao y Yuma En la medida en que los datos de pobreza presentan disminuciones (ENFT 2011), el consumo de leña y carbón para cocer los alimentos también se reduce (ENHOGAR 2011). Por ejemplo, en la región Ozama, integrada por la provincia Santo Domingo y el Distrito Nacional fue donde se registraron los datos de menor pobreza (32.0%), y el menor consumo de combustibles sólidos. Apenas el 1.20% cocina con leña, y el 1.44%, con carbón, para el 2.64%. En Monseñor Nouel, Sánchez Ramírez y La Vega -región Cibao Sur-, donde la pobreza fue calculada en 38.0%, el consumo de leña alcanza el 17.62%, y el de carbón, 1.98%, para un 19.6%. En la región Cibao Norte, conformada por Puerto Plata, Espaillat y Santiago, donde la pobreza se estimó en 34.4%, el consumo de leña fue de 14.96%, y de carbón, de 2.70%, para un 17.6%. En las provincias Duarte, Salcedo, María Trinidad Sánchez y Samaná, que conforman la región Cibao Nordeste, aunque la pobreza afecta al 43.5% de su población, el consumo de leña y carbón es ligeramente menor que en las regiones Valdesia y Cibao Norte. El 17.84% cocina con leña y el 1.51%, con carbón, para el 19.35%. En la región Yuma -constituida por La Altagracia, El Seybo y La Romana- con una pobreza que ronda el 36.7% de su población, el consumo de carbón fue de 8.97% y el de leña, de 3.92%, para el 12.89%. Al contrastar los datos del consumo nacional de combustibles sólidos con encuestas anteriores, se evidencia que en el 2011 hubo un aumento respecto a ENHOGAR 2009-2010, cuando se registró un 9.6% de hogares que cocinaban con leña y un 3.9%, con carbón, para un 13.5% de consumo de combustibles sólidos. Llama la atención que en el 2002 el censo nacional arrojó que en el 9.57% de los hogares se cocinaba con leña y en el 2.7% con carbón, para un 12.27%. Ambos porcentajes (12.27% para 2002, 13.5% para 2009-2010) contrastan con el 17% de 2011.