RD debe implementar políticas vanguardistas

Para la experta en turismo, Ana Isabel Muñoz Mazón, quien estuvo en el país como facilitadora del segundo módulo del Diplomado en Gestión de Destinos Turísticos que actualmente imparte el Consorcio Dominicano de Competitividad (CDCT), la actividad turística es un factor que determina el crecimiento económico de un destino específico. En el intercambio de experiencias analizadas con los participantes, la especialista se refirió a las teorías de crecimiento y desarrollo económico, que establecen la sostenibilidad como base del crecimiento y desarrollo económico de los sistemas turísticos, y que por ende, debe ser entendida y asumida como un proceso de transición y aprendizaje. “Los sistemas turísticos no son estables y su comportamiento es complejo por el número de interacciones que se producen. A través de las conexiones entre los actores del sistema se produce un efecto de aprendizaje que genera rendimientos crecientes y fomenta el desarrollo”, sostiene Muñoz Mazón. Aseveró que “el desarrollo sostenible de los Sistemas Turísticos debe ser planificado, lento, catalítico y armónico respecto de los intereses de todos los actores”, y añadió que los mecanismos para conseguir dicho avance dependen de las capacidades de acción colectiva llevadas a cabo para los fines. “Así, la confianza, el asociacionismo y la colaboración, se convierten en factores determinantes del desarrollo económico y social”. Fomentar la colaboración y cooperación localMuñoz Mazón hizo hincapié en que la colaboración entre los actores de un sistema turístico debe proveer mecanismos de adaptación y reglas claras que delimiten las capacidades de acción colectiva de los individuos. “Estas normas son responsabilidad de las instituciones e influirán definitivamente en el desarrollo de los sistemas turísticos”. Dijo que la colaboración debe ser vista como el conocimiento acumulado por las partes en el proceso de los intercambios, pues se trata de un elemento clave en los destinos y es un recurso de “longevidad”, que aumenta de valor con el tiempo y con el número de relaciones que se llevan a cabo en el destino. En ese aspecto, es muy importante establecer la cooperación local sobre la constitución de una red de relaciones y solidaridad, con el fin de valorizar al máximo el potencial de un territorio; y enriquecer las acciones sectoriales con una reflexión transversal e intersectorial, dijo. Aporte de la OMTMuñoz Mazón, durante su ponencia en el Diplomado en Gestión de Destinos Turísticos, impartido por el Consorcio Dominicano de Competitividad (CDCT), mencionó los factores esenciales para la gestión de una asociación que rige la Organización Mundial del Trabajo (OMT), los cuales establecen que es necesario tener metas y objetivos claramente definidos y transparentes, un proceso de comunicación abierta y frecuente, generar capacidad mediante el aprendizaje continuo, indicadores y mediciones, dotación suficiente de recursos, planificación y gestión del riesgo, especialmente planes de contingencia. LA ESTRATEGIA DE COOPERACIÓNLa estrategia de cooperación, que exige a un individuo o a una organización participar y tomar riesgos, marca una diferencia cualitativa con respecto a la actitud del actor que, por definición, “desempeña un papel” o “juega el papel de un personaje”, o representante elegido, dijo Muñoz Mazón. Por tal motivo, la cooperación, cuya función inicial era la gestión concertada, se ha ampliado y evolucionado hacia un papel más global, apuntó.