Deforestación amenaza a la producción apícola

La apicultura dominicana está en riesgo de disminuir su producción y perder mercado. El espacio que este subsector de la agropecuaria se ha ganado localmente, y en países tan exigentes como Estados Unidos y otras islas del Caribe, se ve amenazado no sólo por la falta de apoyo oficial, sino por un fenómeno que afecta a casi todo el país: la deforestación. La deforestación de extensas zonas montañosas ideales para esta actividad y la acción de la enfermedad varroosis, producida por un ácaro parásito, constituyen se constituyen en una seria amenaza para la industria productora de miel de abejas, una actividad económica que proyecta aumentar sus niveles de exportación y de la que dependen directamente más de cuatro mil personas. Así lo afirmó ayer el ministro de Medio Ambiente, Jaime David Fernández Mirabal, durante un encuentro que sostuvo con representantes de los grupos de apicultores nacionales en el Parque Mirador del Oeste, en Santo Domingo Oeste. Allí abordaron la ineludible relación que existe entre los árboles y el cultivo de miel, a propósito del Día Nacional del Apicultor el próximo 24 de los corrientes. Cada año, 3,454 apicultores dominicanos producen 2,200 toneladas métricas de miel. Además existen 74,654 colmenas, según datos del último censo agropecuario realizado en 2008, por lo que se estima que las cifras se encuentren considerablemente por encima. “La producción apícola ha estado en auge en los último años, ya que los productores se han expandido y han comenzado a agrandar sus apiarios”, aseguró Pablo Payero, presidente de la Comisión Apícola Nacional. Expresó que los productores nacionales han avanzado mucho, ya que se ha sustituido el modo de producción rudimentaria por aquellos que se ajustan a los actuales avances tecnológicos. Y es que, por medio de la crianza de abejas en cajas tipo lastrón, se obtiene una reducción considerable del tiempo de cosecha y un aumento de la productividad, dijo Payero. El crecimiento que exhibe la apicultura nacional ha ocasionado que los productores dominicanos tengan la capacidad de suplir toda la demanda local. Los países a los que se ha penetrado con este producto criollo son Estados Unidos, Puerto Rico, San Martin, Aruba, Curazao, entre otras islas caribeñas. En 2008, para citar un ejemplo, las exportaciones hacia Estados Unido y Puerto Rico ascendieron a US$36,159. “En este momento se estudia la posibilidad de que de iniciar la venta de miel hacia mercados europeos”, reveló el presidente de la Comisión Apícola Nacional. Sin embargo, la deforestación y la ocurrencia de plagas representan un peligro para el sector. LOS AVANCES DE LA PRODUCCIÓN DE MIEL APIARIOS: La apicultura rústica, como generalmente se conoce, se realizaba en troncos de árboles de palma y permitía una cosechar de un galón por colmena cada tres meses. Sin embargo, el establecimiento de los apiarios modernos con cajas lastrón permite la obtención de hasta tres galones por colmena en un mes y medio. Los árboles ocupan un lugar estelar en el proceso de producción, pues las abejas obtienen de ellos el polen y el néctar que luego transforman en miel. Es por ello que los apicultores manifestaron su inquietud ante la tala indiscriminada de árboles que cobra auge en República Dominicana. Este año se han producido denuncias de casos considerables casos de quema y tala de árboles en diferentes zonas del país. Según el Ministro de Medio Ambiente, Jaime David Fernández, esta situación está provocando la pérdida de importantes bosques y áreas protegidas.