Medias e inodoros son parte de controversia

La apertura de los mercados tiene como objetivo beneficiar primero a los consumidores a través de prácticas de comercio que fomenten la sana competencia de comercio. La Organización Nacional de Empresas Comerciales (ONEC) se queja de que este principio ha sido mal administrado por la Comisión Reguladora de Prácticas Desleales de Comercio y Medidas de Salvaguarda, en lo que respecta a la importación de bienes de alta demanda entre los dominicanos. El tema ha sido llevado a discusión por las dificultades que podrían estar enfrentando las empresas importadoras que comercializan inodoros, lavamanos y medias, productos que son importados desde China y otros mercados. Los miembros de la ONEC no consideran justo que los consumidores locales no se beneficien de la apertura comercial y que en cambio se busca proteger a una o dos empresas locales que no se han ocupado de ser competitivas en precios y calidad. Los principales directivos de la organización, Pedro Pérez González, presidente; Eduardo Muñiz, secretario; y Antonio Ramos, vicepresidente, entienden que el mercado puede funcionar con más equidad, sin perjudicar a la industria local, pero tampoco a los consumidores que merecen precios competitivos y más opciones. La preocupación de la ONEC ha venido más bien por la forma en que la comisión ha trabajado ciertos casos, así como por el tratamiento que le ha dado, que a juicio de los miembros de la entidad empresarial ha actuado de manera parcializada hacia ramas específicas de la producción nacional que en ningún caso han mostrado interés de beneficiar a los consumidores locales. “Queremos hacer la aclaración de que es sólo a ciertas ramas de la producción nacional porque no todo el sector industrial comparte la forma en que se ha venido desenvolviendo la comisión”, sostuvieron los empresarios. La comisión tiene dos mecanismos para imponer medidas de salvaguarda: la imposición de cuotas a las importaciones y el aumento de aranceles por encima de lo estipulado en la OMC. Sobre el caso de las medias el año pasado abrieron una investigación para imponer medidas de salvaguardia y al determinar que no había nada fuera de lo normal cerraron una investigación en diciembre. “Nos sorprendió que el primer día laborable del año reabren el caso, en esta oportunidad, a solicitud de cuatro empresas productoras que son las que controlan el mercado nacional”, explicaron. “Hay una cosa importante, y es que nosotros como organización nos beneficiamos de una cosa ni de otra, sino de ambas cosas. Somos intermediarios de ambas operaciones. Compramos a los locales e importamos. Entidad más equitativa que nosotros no puede existir, ya que le servimos a todos”, sostuvieron los dirigentes de la ONEC. Según sus ejecutivos, las empresas que forman parte de la ONEC han sido siempre grandes compradores de la industria nacional y así será por siempre, razón por la cual, afirman, esa entidad ha asumido posiciones racionales y equitativas respecto a estos y otros temas económicos. La Comisión de Salvaguardia comienzó a funcionar en el país hace un año, aunque fue conformada luego de someter una terna bajo la ley 1-02, que la sustenta. IMPACTO ECONÓMICO DE LAS MEDIDASLos ejecutivos de la ONEC indicaron que las últimas medidas temporales no fueron solicitadas por ninguna de las ramas de producción nacional, razón por cual fueron sorprendidos. “Esta es una medida que provoca un aumento de RD$33 millones en el caso de las medidas y de RD$156 millones en lo que respecta a los inodoros y lavamos, ya que estamos hablado de un arancel 35%”, explicaron. Recuerdan que entre los objetivos de la Comisión Reguladora de Prácticas Desleales de Comercio y Medidas de Salvaguarda está velar por que en los acuerdos de libre comercio las importaciones no provoquen daños a la producción interna. “Se habla de importaciones excesivas. Son términos muy subjetivos y hay que estar de acuerdo con la fase de demostrarlo con datos”, dijeron.