Santo Domingo 28°C/28°C few clouds

Suscribete

ARTES VISUALES

MarioJosé Ángeles o un baile de formas y colores ininterrumpido

Hace muchos años que trabaja con dedicación y labor en desarrollar su arte. Pasó mucho tiempo fuera del país adquiriendo técnicas y absorbiendo influencias diversas.

La obra de Mario José Ángeles está compuesta a partir de un dibujo firme, un gran dominio del trazo y una fluidez de la línea que corre sobre la superficie de todas sus obras. Al mirar sus obras, sentimos una gran libertad, un baño de aire, la imaginación jugando plenamente su rol, gracias a una expansión de los colores sobre la superficie de los cuadros dándoles un movimiento interno, una especie de dinámica interna de la mancha de color.

Abstracto / figurativo

Sus obras juegan entre lo figurativo y lo abstracto. Para él, es algo totalmente consciente y para nada accidental. Es interesante ver como la forma pasa de un lado a otro lado de la frontera entre figurativo y abstracto. Hay partes de los cuadros que son claramente figurativas, son formas que podemos identificar (partes de cuerpo, animales, vegetación…). Estas partes dan un relieve físico en el sentido que ese relieve es visual aunque podríamos debatir sobre el hecho que lo que se ve es solamente una imagen incompleta de la realidad.

El punto es que las partes abstractas entran en competencia con las figurativas. Frente al abstracto, el ser humano frecuentemente busca referencias concretas, algo “realista” para asegurarse de su propia condición. Pero, al tener frente a la vista, unas obras mezclando partes abstractas y figurativas, él no necesita buscar algo dentro de lo abstracto porque tiene lo figurativo como refugio. Entonces, tanto lo abstracto como lo figurativo existen por sí mismo. Lo abstracto adquiere una dimensión realmente abstracta donde las formas y los colores juegan un papel casi totalmente libre.

Un colorista espectacular

El otro punto es que el espectador hace una especie de síntesis entre los dos mundos creando un punto de tensión entre ellos. Esa tensión desaparece cuando las formas, y más que las formas, los colores compiten. Existe una interpenetración de los colores para formar las zonas más frágiles de sus cuadros, donde se diluyen las manchas de colores para dar otro color o mejor dicho una complejidad de tonos de colores que crean una riqueza sumamente interesante desde el punto de vista de la química del color. El habla de “la sensación agradable de los colores”. La belleza proviene no solamente de esa fragilidad sino también de una sorprendente mezcla de tonos. Para él, la búsqueda de la Belleza es algo sumamente importante. Él dice que “el arte no se puede concebir sin la presencia de la belleza”.

Su técnica se parece mucho a la de la acuarela aunque pinte con acrílica. El deja la materia colorida así para que la tela actúe, siendo el accidente parte del proceso de elaboración de la obra y permite llevar la obra a otra dimensión. Por ejemplo, en la obra Amores, tres colores primarios están presente de forma discreta, son los complementarios que juegan el papel principal. Existe una distribución espacial equilibrada de los colores que podemos relacionar con los sentimientos de los protagonistas de la obra. El juego de Amor entre cada miembro de la pareja tiene una representación física con el uso del color. Los colores serían una transposición de los sentimientos de los dos seres humanos, sentimientos hechos de diferencias, complementariedades o fusiones. Él dice que “hay algunos colores que van más allá de la gama terrenal, una paleta con otras vibraciones para llegar a otra dimensión y que la forma entra también en ese análisis”. Esa visión de los colores es una herencia de los pintores del principio del siglo XX.

La forma bailando sobre la tela

La forma también puede jugar el primer papel como podemos ver en la obra madre azul. Es un símbolo de la madre naturaleza, tenemos al lado de esta mujer el globo terrestre y en su superficie ballenas en representación de la fauna, y una especie de vegetación que sale de este globo, representación de la flora. Tenemos así una confrontación entre el mundo vegetal y animal teniendo como escena el planeta y la madre azul dirigiendo o mejor dicho cuidando a su lado esa representación de un microcosmo bien frágil. Sale de esa obra no solamente una gran dulzura pero también una gran serenidad un poco inquietante por dos detalles. La desproporción entre las ballenas y la tierra nos evoca que el reino animal corre un gran peligro en su propio ambiente. Por otra parte, la madre azul no tiene cabeza.

El carácter intemporal

Hablando con el artista, él dice que “sus obras tienen un lenguaje más universal, lenguaje más galáctico que el simple efecto de la imagen y que de toda manera la abstracción es producto de unas vibraciones”. El punto es que, con la abstracción, el mensaje que vehicula la obra va a buscar sus raíces en algo más metafísico sobre todo que esa obra da una gran importancia a la línea y el color que pueden existir por ellos mismos y transmitir sus efectos sobre el espectador solos.

Desde un punto iconológico, la presencia “fortuita” del ser humano muestra la fragilidad del hombre en un mundo frente a los cuatro elementos con un enfoque con los del aire y del agua. Mariojosé nos pone a reflexionar sobre la dualidad, y no la lucha, que siempre ha entretenido el hombre con la naturaleza. No es una naturaleza descriptiva con árboles, nubes etc., sino una simbolizada por los elementos. Algunas veces, el personaje está en levitación, flotando en el aire. En esta obra la dimensión poética nos permite aceptar que el hombre se deja flotar.

Gaston Bachelard, en su libro, la poética del espacio, describe como los artistas llegan a lograr plantear físicamente el espacio en una obra. El habla sobre todo con una perspectiva analítica de la figuración del espacio. MarioJosé Ángeles se cuestiona y cuestiona el espectador a partir de este mismo planteamiento crítico del espacio.

La intemporalidad de sus cuadros es el componente más importante. Sus fondos no son realmente paisajes. Son contextos fuera del tiempo para hacernos reflexionar sobre el tiempo. Aunque sus fondos sean intemporales tanto sus retoques como los efectos borrosos y los personajes son elementos que marcan o gravan el tiempo. Un efecto puede ser borroso solamente por el hecho que exista una distorsión entre el espacio y el tiempo. Además, este efecto es siempre ligado a la idea de movimiento. Es una manera visual y plástica de mostrar el tiempo. Estos elementos son factores temporales que interactúan con el fondo fuera del tiempo, creando imágenes fuera del espacio temporal común. Son como iconos en el sentido que los elementos componiendo la obra están fuera del fondo, asegurándole su intemporalidad.

Intemporalidad también de la observación y de la admiración que tenemos cada vez que estamos frente a uno de sus cuadros. Se para el tiempo por un momento de pura contemplación, pedacito de tiempo fuera de lo cronológico que permite crear un vínculo muy especial entre el espectador y la obra.

Tags relacionados