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ARTES VISUALES

Miguel Pineda: creador auténtico

Este laborioso pintor capitaleño ha venido realizando una obra de esencias donde resaltan los valores de la espiritualidad individual, expresadas desde la magia de su memoria.

Pintura. "Recuerdo" (2017, mixta / lienzo, 30 x 30.).

Pintura. "Recuerdo" (2017, mixta / lienzo, 30 x 30.).

Al compás de la danza, entre la inspiración y el delirio, su pincel se desliza sobre el lienzo. En sus procesos creativos, la musa se encarga de reproducir la fantasía que corre delante de su preclara imaginación.

No teme a los sufragios de la realidad. Desde joven comprendió que la realidad y la magia se unifican en la armonía de la textura, para evocar el lenguaje del alma y alcanzar el cosmos expresionista.

El esmero encarnado en sus obras, deslumbra. Miguel Pineda es un ser humano tenaz, firme e incesante, que visualiza al inicio, su futura creación como desafío; un reto que requiere exigencia, en su pretensión constante de alcanzar el milagro de la creación. La minuciosidad se transforma en elemento inherente al momento de expresar en cada una de sus obras “lo que ha vivido”.

A través de las alegorías empapadas de sombras y diversidad de tonalidades, los rasgos figurativos son contemplados en sus colecciones a lo largo de su exitosa carrera profesional.

Memorias al margen Su primera etapa creativa (2008), abarca sus producciones desde finales de los 80 hasta principios de la década de los 90. El artista asume la poética como melodías pictóricas del entorno: “paisajes con hojas, aguas fluviales y marinas y sobre todo, luz, mucha luz en todas y cada una de las obras donde se conjugan los tonos primarios y secundarios”. La estridencia que personifica el arte en esta creación es una “límpida alucinación general”.

Briznas de la memoria Durante su segunda etapa (2003-2009), se reúnen unas 51 obras que sobresalen por contener elementos que exaltan el paisajismo interiorizado, pero esta vez distinto a la realidad, envuelto en una amalgama de colores resplandecientes, causando al espectador una sensibilidad ocular.

En esta etapa realiza un viaje a Europa, después de participar en el concurso por el Bicentenario de la Revolución Francesa. En esa ocasión, obtuvo el máximo galardón de pintura. Esa distinción produjo en Pineda la inquietud de una reflexión retrospectiva, guiada por los museos de Paris y sus colegas.

“Un autoexamen pictórico”, llevó a la decisión de “sustituir una producción hueca y bonita, por otra de pretensión trascendente”, decidiendo hacer arte a partir de su vivencia personal e identidad, de forma que logra formación e individualización propia.

Caribe mágico Después vendría una tercera impronta (2009-2010) donde sobresalen obras representativas de un sorprendente y llamativo universo visual, destacan los resortes líricos de esta novedosa colección. La peculiaridad del artista ante este nuevo reto en su carrera se vincula a su asimilación con respecto a Tamayo, Klee y el arte rupestre de los Arawakos.

Algunos críticos de arte consideran que sus obras representativas de esa etapa muestran una policromía vehemente a través de la cual se entremezcla la luz con los elementos de la naturaleza, los matices del entorno y los signos de la memoria.

Cabe destacar en sus propuestas el empleo de un elemento de misterio, un impulso de procrear un estigma, con un contenido emocional capaz de cubrir un hecho real, aunque su significado sea simbólico. Tomar en consideración a la sociedad, al siglo y a la época instaura una fuerte carga ideológica en sus ilustraciones.

(+) APOYO Y VALOR A SUS CREACIONES

Laura Gil, Amable López Melendez, Marianne de Tolentino y Cándido Gerón han sido críticos de arte, que le han otorgado a Miguel Pineda el impulso para continuar con dedicación y exigencia, creando obras artísticas que rebasen el sentido común, y que tengan como premisa servir al desarrollo de la inteligencia individual. Su pintura no deslumbra, pero hace algo mejor: aporta. Tiene la exuberancia caribeña y la mirada de la permanencia.

Obra. "Entre el sol y la lluvia" (2010, mixta, 73 x 55.).

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