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SENDEROS

¿Qué nos falta por aprender?

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Thany Matos de SuccartSanto Domingo

¿Cuántas ventanas y puertas abrimos a diario? ¿A cuántas cajas de regalos le sacamos el lazo en nuestras vidas? Se ha puesto a contar la veces que ha abierto la puerta de la esperanza, para volver a cerrarla de nuevo. Cuántos caminos ha emprendido de los cuales, estoy segura, la gran mayoría abandona a la mitad.

Se han abierto muchas puertas a lo largo de la historia de la humanidad, las cuales en su mayoría son puertas terrenas que han dado paso a los conocimientos terrenos. Conocimientos que la humanidad ha aprendido y aplicado a lo largo de su historia. ¿Qué nos falta por aprender? Ya el conocimiento que nos ofrece la Madre Tierra está concluso, al no poder sacarle más conocimientos nos hemos dedicado a destruirla, buscando quizás encontrar algo que ella no nos dará.

La humanidad ha alcanzado un grado de conocimiento sobre lo terreno y le queda poco por saber, pero lo que falta es más grande que los conocimientos sabidos.

Por eso, ha llegado el momento de que el ser humano tenga acceso a otro tipo de conocimiento a través de las aperturas visibles, de las puertas celestes.

Han elevado su grado de vibración para poder tener acceso a estas puertas, porque estarán visibles para la gran mayoría, aunque no todos podrán pasar por ellas, y no todos tendremos o podremos ver o adquirir el mismo conocimiento que emanarán de ellas.

Las puertas estarán abiertas, tenemos la vibración para verlas, no todos para cruzarlas.

Pero, ¿cómo abrimos el conocimiento que contienen? Desde el nacimiento del primer hombre la humanidad posee estas llaves, todo es un plan perfectamente orquestado, Dios es el arquitecto perfecto, recuerden que somos su obra maestra.

Póngase a pensar por diez segundos nada más, cuáles pueden ser esas llaves en nuestro cuerpo. ¿No saben? Son las manos, cada mano es un juego de llaves que abre cinco puertas, así tenemos para abrir diez puertas, pero si juntamos las manos tendremos entonces un juego de llaves más poderoso que cada llavero individual, la figura que se forma al juntar los dos primeros llaveros es uno de los símbolos celestes más poderosos.

La manera en que coloque los dedos o las llaves será un conocimiento o una puerta distinta a las demás. Así que, imagine las posibilidades. Pero para abrir algunas debe tener una vibración muy alta.

¿Se han dado cuenta de la forma en que colocan las manos cuando oran? Esa es una forma de abrir un canal para ser oídos por el Espíritu Santo de Dios.

Una puerta abierta invita a entrar, pero también lo que está del otro lado puede salir y puede verse.

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