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Con “uñas y dientes”

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Luis Encarnación PimentelSanto Domingo

Se entiende que en medio de un proceso electoral, donde la lucha por el poder político del país es lo que está en juego, la oposición busque sacarle provecho a cualquier punto flaco que advierta en el desempeño de alguna área del gobierno central. Que bien puede ser el caso de la OISOE, tras el escándalo derivado del sacrificio del joven arquitecto que, acorralado por el retraso y “mutilación” en el pago por una escuela construida, se dio un tiro, pero que sería un error de bulto meter en el mismo saco el programa de las ”visitas sorpresa” del presidente Danilo Medina a las comunidades los fines de semana.

En el primero -reconocido como un mal viejo en distintos gobiernos, desde que se creó una oficina que nunca ha cumplido con sus funciones y se le ha visto como competencia del Ministerio de Obras Publicas- el jefe de Estado, como le recomendara el cardenal Nicolás López Rodríguez, bien haría con “dar unos cuantos sablazos para poner la casa en orden”.

Definitivamente, el gobernante y de nuevo candidato, que se comprometió con el pueblo y con Juan Bosch en propiciar “un gobierno ético”, va a tener que dar un ejemplo contundente allí, cortando por donde sea, enfermo o hasta por lo sano.

En el caso de las visitas del Presidente, y de la asistencia y las soluciones inmediatas que se derivan de las mismas, no hay dudas que son de los puntos luminosos más resaltables de la gestión de Medina.

Por eso, precisamente por eso, los ataques de la oposición, especialmente desde el litoral del PRM, con los que creo incurre en otra pifia cuando generaliza.

En el caso de su candidato, expresa que “toda la estructura del gobierno es una magia organizada”.

El asunto es que al generalizar frente a un determinado caso comprobado, se manda una mala señal, y se mata el “espíritu de cuerpo” de aquellas personas e instituciones que estén haciendo las cosas bien.

Pero con lo de las visitas, Danilo es un ducho en política y sabe muy bien lo que resuelven en las comunidades del país, incluyendo el posicionamiento o beneficio personal que le han generado. Por eso le corta el paso a los críticos “insensibles”, y advierte, en nota de estreno de su asesor de prensa Luis García, que defenderá las mismas “con uñas y dientes”, porque mejoran la calidad de vida de los pobres.

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