Ma Ying-jeou y el “Consenso de 1992”

En su reciente visita a la República Dominicana, Ma Ying-jeou, presidente de Taiwán, se refirió en varias ocasiones al “Consenso de 1992”. Me consta que lo citó en casi todas sus reuniones, lo que envía un claro mensaje de la importancia que ha tenido y sigue teniendo para el presidente Ma. Ha sido parte de su discurso desde su primera campaña a la presidencia, pero también ha sido parte de su accionar como presidente en sus dos períodos, que comenzaron en 2008 y terminarán en 2016.

Para entender la nueva etapa de las relaciones entre China y Taiwán, el acercamiento que han tenido en los últimos años y los logros alcanzados en ese sentido, es pertinente saber de qué se trata el llamado Consenso de 1992. Todo comenzó en marzo de ese año, cuando la Asociación de las Relaciones a Través del Estrecho de Taiwán (ARE), de la RPCh, presidida por Wang Daohan, y la Fundación de Intercambios del Estrecho (FIE), de Taiwán, presidida por Koo Chen-fu, realizaron un primer encuentro de trabajo.

Después de varios meses de discusiones, en noviembre, Wang y Koo llegaron a un consenso verbal sobre la base de que “ambos lados del Estrecho de Taiwán se adhieren al principio de una China y hacen esfuerzos por la reunificación de la patria”.

Ese acuerdo, en pocas palabras significa que para los chinos del Continente, como para los chinos de la Isla, sólo hay una China, esa China única e inconfundible, pero que cada lado la interpreta a su manera.

Aunque fue un acuerdo verbal, ese “consenso de 1992” ha servido de base para negociaciones de acercamiento a partir de ahí. Quizás no se ha avanzado más porque el primer presidente electo democráticamente en Taiwán, Lee Teng-hui no reconoció la existencia de dicho consenso y peor aún, el presidente que lo sucedió en mayo del año 2000, Chen Shui-bian, lo reemplazó por su propia interpretación del consenso con la que justificaba su afán independentista.

Es el presidente Ma Yingjeou quien retoma dicho consenso diciendo en su discurso de toma de posesión, “deseo reiterar que, en base al, Consenso de 1992, debemos reanudar las negociaciones a la mayor brevedad posible”.

¿Ahora se entiende por qué es tan importante para el presidente Ma este acuerdo verbal, y por qué lo citó varias veces aquí en la República Dominicana? Insistir en solicitarle al presidente Danilo Medina que rompa relaciones diplomáticas con Taiwán y las establezca con China, como lo han hecho y siguen haciendo políticos, analistas y periodistas dominicanos, es un desconocimiento de cuáles son las bases de las actuales relaciones entre ellos. Decir que China no tiene interés en la región centroamericana, como dijo el “experto nicaragu¨ense en temas internacionales Alberto Alemán”, es una muy mala lectura del Consenso de 1992 y de las actuales relaciones entre China y Taiwán.

Yo creo todo lo contrario, China tiene mucho interés en esta región, por diversas razones, pero precisamente porque se “hacen esfuerzos por la reunificación de la patria”, por el momento, prefieren no lesionar la confianza depositada en el proceso, respetando los aliados diplomáticos de Taiwán. No es falta de interés, es respeto de un proceso de reunificación pacífica. Pero si vemos los números de comercio, entre China y Centroamérica, la visita de empresarios chinos interesados en proyectos en la región, la visita de empresarios y destacadas figuras de Centroamérica a China, tendremos que decir que hoy como nunca, China tiene interés por Centroamérica.

Invito a conocer el Consenso de 1992 como base para las actuales relaciones entre China y Taiwán. Le aseguro, que de ahí en adelante, otra será su percepción y sus opiniones.