CAOS
Viajeros varados y destrucción en el noreste de EEUU
POR LA GIGANTESCA TORMENA INVERNAL
Millones de personas fueron afectadas el lunes directa o indirectamente después que la gigantesca tormenta invernal de diciembre del 2010 se abatió contra el noreste de Estados Unidos durante uno de los días de mayor circulación de viajeros en el año. Los vuelos en el espacio aéreo de mayor actividad en el país estuvieron casi todo suspendidos, y miles de viajeros quedaron varados, convirtiendo las terminales de los aeropuertos en hoteles al aire libre mientras esperaban abordar sus aviones. Un camión acoplado carreteó fuera de la pista y se estrelló contra una vivienda en Maine, y una mujer dio a luz en una autopista de Nueva Jersey, provocando una congestión de vehículos. Los trenes del servicio subterráneo por lo general confiables, dejaron de funcionar por algunas horas. Los vientos que alcanzaron una fuerza de 105 kilómetros por hora (65mph) derribaron tendidos eléctricos, dejando a decenas de miles de personas sin servicio por toda Nueva Inglaterra. Esta tormenta tomó a la mayoría desprevenido, con acumulaciones de unos 60 centímetros (2 pies) de nieve en un fin de semana feriado cuando casi todos estaban fuera de la ciudad, aletargados por el ambiente navideño o simplemente sin preparación para enfrentarla. Un irritado alcalde neoyorquino Michael Bloomberg defendió el esfuerzo de limpieza de la alcaldía, alegando que las cuadrillas demoraban por los carros abandonados en las calles. "No hay razón para que todos se alarmen", destacó. "Nuestro municipio está haciendo exactamente lo que ustedes desean que se haga", agregó. Después de pasar el domingo por la noche dando vueltas tratando de dormir en el piso de los aeropuertos, miles de viajeros con cara de sueño pasaron el lunes formando filas, mendigando ser incluidos en vuelos, peleándose por conseguir taxis y a la caza de un cuarto de hotel. La tormenta anuló casi todos los medios de transporte: desde los autobuses en el terminal más congestionado del país cerca de Times Square, hasta los trenes de pasajeros por lo general más puntuales de la región. El lunes al anochecer los aviones comenzaron a aterrizar en los aeropuertos Kennedy y LaGuardia. Se esperaba que los vuelos fueran a comenzar a llegar al aeropuerto de Newark, Nueva Jersey, tarde por la noche.