Ruta gastronómica en Constanza

El equipo de la Fundación Sabores Dominicanos participó recientemente de esta ruta gastronómica. Antes de iniciarla tuvimos una parada en el Restaurant Miguelina, donde nos atendió la hija de Miguelina, Imilse García, que funge como gerente de Servicio al cliente y Laura Batista, nieta de Miguelina e hija de Imilce. Es un negocio familiar donde también trabajan o supervisan otros familiares para darle calidad al servicio. Degustamos un chivo riquísimo. Ya comenzando la ruta oficial nos detuvimos en Mountain View Café at Casabito, a 7 kilómetros de la Autopista Duarte, en la carretera que conduce a Constanza. Ya en el pueblo Miguelito’s Grill y Tapas fue el primero en visitar presentándonos su propietario, Juan Jiménez, cuatro platos. De ahí nos trasladamos a Aguas Blancas Restaurant, donde nos atendió Emilia Cáceres y nos invitó a degustar seis platos y varios postres. De ahí nos trasladamos al Restaurant Moncarlo, en el que Solange Quezada nos presentó nueve platos, entre cremas, diferentes carnes y otros platos fuertes. Les diré que había visitado Constanza, pero no me imaginaba la riqueza gastronómica, su agricultura y su hospitalidad. Me envolví en una noche fresca para visitar La Esquina GastroBar, un café exquisito donde se reúne gente de diferentes edades para disfrutar de mojitos, té, sangría, la cerveza negra artesanal que preparan allí con el nombre de Ferringer y recibir las atenciones de Salvador Ferrer. No nos pudimos escapar de las hamburguesas callejeras de Yossi Durán. Al día siguiente fuimos a la repostería A punto de nieve, de los esposos Ambiorix Núñez y Raisa Abud, donde probamos un delicioso té de fresas con churros rellenos de esa misma fruta y crema. De ahí visitamos Al-andalus Tropical Invernadero (Agrinver-Group) donde José Sobrevela nos invitó a un recorrido por las instalaciones donde se encuentra el cultivo hidropónico de fresas. El Comedor de Luisa es un lugar para probar la magia del sazón criollo a nivel popular. Altocerro Villas, Hotel & Camping, de Daniel Matías, donde pernoctamos, no se quedó atrás con sus platos, al igual que Dilenia Restaurant, Restaurant Mi Casa de José Acosta; La Montaña de Chenco, de Grecia Piña y las pizzas de vegetales, en Antojitos D’Lauren, de Johnny Tactuk. No se podía pedir más. Gracias al señor Tactuk, Daniel Matías y a Stephanie Díaz por su compañía durante el recorrido, incluyendo la visita al Divino Niño y al hotel Nueva Suiza en remodelación.