Segunda parte sobre terremoto

Este artículo que iniciamos el martes pasado ahora se ajusta muy bien a lo que acabamos de sentir el pasado domingo. Así que es preciso refrescar la memoria sobre lo expresado en la entrega anterior. Los sismos pueden causar movimiento y ruptura del suelo, corrimientos y deslizamientos de tierra, incendios, licuefacción del suelo y maremoto. Este fenómeno natural se mide en grados con un aparato llamado sismógrafo. Existen varias escalas utilizadas para medir su intensidad, pero la más usada es la de Richter, igualmente denominada sistema de magnitud local. Es una escala logarítmica en la que se asigna un número para cuantificar el efecto de un terremoto. Los cinco terremotos de mayor intensidad en la historia reciente han ocurrido en Chile, 1960 (9,5); Estados Unidos, 1964 (9,2); Indonesia, 2004 (9,1); Rusia, 1952 (9,0) y Japón, 2011 (9,0).