Cuidados
Cuando la piel se inflama
La dermatitis por contacto es una afección de la piel causada por entrar en contacto con un irritante externo o alérgeno.
Tener una bonita apariencia estética es el resultado de una buena salud. Para poder lucir una piel impecable es importante el uso de productos adecuados y ser consciente de lo que es perjudicial para la misma.
La piel es el mayor órgano que tiene el ser humano. En muchas ocasiones esta reacciona ante algún ambiente o elemento particular, a través de una alergia o irritación que no presenta razón aparente, pero que podría ser dermatitis por contacto, una afección inflamatoria causada por entrar en contacto con un irritante externo o alérgeno, explica Betssy Hazoury, cirujana dermatológica.
“La dermatitis por contacto constituye el 70-90 % de todas las enfermedades ocupacionales de la piel”, detalla la especialista de Dermasurgery.
Agrega que este mal podría afectar la apariencia estética y la autoestima del paciente, al tener un impacto dañino en las relaciones personales y sociales, en la calidad de vida e incluso amenaza el desarrollo.
¿Cuáles son los diferentes tipos de dermatitis de contacto?
La dermatóloga comenta que existen dos: la irritativa y la alérgica.
La dermatitis de contacto irritativa es una reacción que se produce por un daño directo a la piel, por agentes químicos o físicos, parecida a una quemadura, más que una alergia. Aproximadamente el 80 % de los casos de dermatitis de contacto es irritativa.
Las irritaciones de este tipo son producidas por ácidos, jabones, detergentes, suavizantes de tela, disolventes u otros químicos, guantes de goma, cemento, tintes para el cabello, insecticidas o hasta champús.
Mientras que la dermatitis de contacto alérgica se produce cuando la piel entra en contacto con una sustancia que le provoca una reacción alérgica en particular y no hará la reacción de inmediato sino entre 24 y 48 horas o cuando entre en contacto la segunda o tercera vez, incluso a veces tiene que estar en contacto mucho tiempo para hacer la reacción.
Esto es causado por elementos como guantes de látex, cosméticos, antibióticos, telas y prendas de vestir, entre otros artículos de uso cotidiano.