Creyente no puede liberarse

“El que quiera seguirme, que se niegue a sí mismo, cargue con su cruz cada día y se venga conmigo”.

Es importante que de vez en cuando se piense en las condiciones que se requieren para seguir a Jesús. Por ejemplo, la cruz expresa la vida del cristiano porque la existencia del que lo sigue está definida por la vida de Jesús, cuya vida precisamente culmina con su entrega en la cruz. El creyente no puede liberarse de esa cruz porque es una actitud constante de la existencia cristiana.