Aumento de glúteos

Hoy en día una de las cirugías más solicitadas es la de aumento de glúteos. Creo que la popularidad de Jennifer López y Kim Kardashian ha influido en este auge. Con respecto a esta cirugía hay algunas preguntas muy frecuentes:

¿Cuáles son las opciones para aumentar mis glúteos?

Hay dos opciones seguras para aumentar los glúteos: la grasa del paciente, la cual es mi favorita por ser una sustancia propia del organismo que tiene menos riesgo de rechazo, y los implantes de silicona, los cuales son utilizados cuando el cuerpo del paciente no tiene la cantidad de grasa suficiente para ser inyectada en los glúteos.

Cuando se utiliza la grasa del paciente, utilizamos la liposucción para recolectarla, luego se procesa y es inyectada en los glúteos, dando la forma deseada e ideal.

No es nunca recomendable utilizar sustancias no aprobadas por especialistas, ya que el inyectar en el cuerpo productos cuya composición desconocemos causa daños irreversibles a la figura.

¿La grasa inyectada puede irse?

Un porcentaje de la grasa inyectada (30 a 50 %) es reabsorbida por nuestro cuerpo. La grasa restante actúa como nuestra propia grasa: si bajamos de peso, disminuye; si subimos de peso, aumenta.

Luego de realizado el procedimiento, el paciente debe durar de 6 a 8 semanas sentándose y recostándose sobre un “boppy pillow” o almohada de maternidad, la cual es de suma importancia en el proceso de recuperación, ya que protege la grasa inyectada, dándole al mismo tiempo la forma y apariencia necesaria para que el paciente no pierda sus resultados iniciales. Esta almohada mantiene la grasa en su lugar y también cuida los glúteos de tocar cualquier superficie plana.

¿El aumento de glúteos causa dolor?

Como toda cirugía estética, provoca molestias. La inflamación en el glúteo puede todavía causar más molestias por comprimir momentáneamente las fibras nerviosas que van a las piernas, pero luego esto irá cediendo.

¿Puedo bajar de peso sin preocuparme?

Luego de la cirugía, es importante saber que al bajar de peso, al igual que todas las áreas con grasa localizada en el cuerpo, también nuestros gluteos pueden disminuir su forma y tamaño. No es que no estemos a dieta o que no comamos saludable, pero es importante mantener nuestra figura, lo que puede lograrse haciendo ejercicios musculares en el gimnasio como los famosos “squats” o sentadillas.

La cirugías estéticas son una herramienta para ayudarnos a alcanzar una mejor versión de nosotras, pero hay que recordar siempre que para mantener estos hermosos resultados debemos incorporar a nuestra vida dietas y ejercicios.