¿Estás preparada para ser madre?

“Los hijos son la herencia que nos da el Señor, los frutos del vientre son la recompensa que viene de Dios”. Eso dice el salmo 127 versículo 3. Sin lugar a dudas ser madre es uno de los dones más hermosos que posee la mujer, o por lo menos eso piensan muchas que han tenido la oportunidad de serlo.

Aunque la maternidad sea algo tierno y bonito, hay que tener en cuenta los cambios que produce en las vidas tanto de las mujeres como de los hombres, y es que si la pareja no está preparada física ni mentalmente las consecuencias pueden ser irreparables.

En esta etapa ya no hay tiempo de salir con los amigos, los viajes al exterior que quizás se habían planificado, para maestrías o vacaciones, quedan en un segundo plano. En ese momento, son los hijos y la pareja, en caso de tenerla, los que ocupan el tiempo; el agobio de las tareas del hogar se convierte en rutina, y las malas noches son el diario vivir.

Edad ideal El ginecólogo obstetra Isaías Pumarol asegura que, desde el punto de vista fisiológico, la edad adecuada para concebir es de los 22 hasta los 30 años.

“Antes o después de esta edad los riesgos de tener niños con síndrome de Down y otras condiciones estadísticamente son mayores”, asegura.

Los jóvenes suelen pensar que cuando se llega a los 18 años, que es la edad en la que legalmente se es mayor en República Dominicana, son capaces de cuidarse solos y mantener una familia, aunque en la mayoría de los casos los embarazos a temprana edad no son planificados.

Carolina Amézquita, una joven estudiante de Derecho de 22 años, cuenta que se enteró de que estaba embarazada cuando tenía 21 años y esto ha detenido por un tiempo su sueño de ser abogada. Aunque sigue estudiando, ahora tiene menos tiempo para hacerlo, pues debe cumplir con su rol de esposa y madre.

“Pude salir adelante por la ayuda de mi familia, que fue indispensable en este proceso. También mi pareja, el padre de la niña, estuvo siempre apoyándome, entre los dos enfrentamos la situación, aunque no ha sido nada fácil, porque no he podido terminar la carrera”, dice Carolina.

Nivel emocional Otro caso es el de Danienlly Castro, estudiante de Arquitectura que ha tenido que pasar muchas dificultades para poder estudiar y salir adelante, pero con la llegada de su primer hijo la situación se vio más difícil.

“Voy a la universidad porque quiero salir adelante y darle un mejor futuro a mis dos niños, pero hay días que no puedo ir, ya sea porque no tengo quien se quede con ellos, o porque falta el pasaje”, cuenta Danienlly, de 25 años.

El nivel emocional que se tiene entre los 18 y 21 años no es suficiente para formar una familia. La psicóloga clínica y terapeuta familiar Olga María Renville considera que por más madurez emocional que se tenga en esa edad, aún la mujer no ha logrado las condiciones seguras para dar soporte a la crianza de una criatura.

“Le falta crecer emocionalmente a través de la experiencia, definir y tener claras sus prioridades en vida”, afirma.

La terapeuta recomienda esperar a haber alcanzado algunos proyectos de vida antes de un embarazo, aun teniendo una pareja estable, hasta tanto exista un respaldo que permita a la madre un embarazo saludable y otorgar el cuidado, el tiempo y el amor que amerita el niño para un desarrollo sano.

“Está comprobado que madurez emocional no siempre coincide con edad cronológica, pero es un tema de tiempos y por más madurez emocional que pueda tener una mujer en esta etapa de su vida, aún no ha logrado crear las condiciones seguras para dar soporte a la crianza de una criatura. Le falta crecer emocionalmente a través de la experiencia, definir y tener claras sus prioridades en vida”, puntualiza.

Campaña Como muestran las historias de Carolina y Danienlly, son muchos los casos de jóvenes embarazadas o con varios hijos que han tenido que dejar atrás sus sueños. Algunas quizás tengan el apoyo de su familia, otras no, pero definitivamente hay un factor común en cada una de las situaciones y es que, sin importar el estatus social, un embarazo no planificado y a destiempo cambia la vida.

En República Dominicana los embarazos de jóvenes que aún no tienen estabilidad económica va en crecimiento. ¿Cómo se evitan estos embarazos? Y ¿qué se está haciendo para prevenirlos?

Actualmente, en el país un grupo de jóvenes universitarios promueve la campaña llamada “Tú no ta’ pa’ eso”, con la que buscan prevenir los embarazos en adolescentes, y que estos se enfoquen en realizar actividades que le aporten cosas positivas a sus vidas.

En sus redes sociales promueven el sexo responsable, con frases como “no te lleves de mitos, aclara tus dudas sobre la sexualidad”, apoyando a los jóvenes a tomar una decisión consciente y no apresurada.

CAMBIO DE PLANES POR EL EMBARAZO Los padres juegan un rol muy importante en el futuro de sus hijos, si no hay apoyo por parte de los padres, lo más probable es que la joven madre se vea obligada a abandonar los estudios y tenga que trabajar, dándole solamente la opción de tener a su niño en una guardería o dejándoselo a alguien que lo cuide.

La psicóloga y terapeuta Olga María Renville asegura que no importa la edad en que suceda, el embarazo representa un impacto en la forma de pensar y sentir y conlleva a una revisión inmediata de los planes futuros. “Posterior al nacimiento y durante los primeros años es muy importante la presencia y el cuidado de la madre para un sano desarrollo físico y emocional del bebé.

Esto representa tiempo en el cual deberá abandonar o reducir la marcha en sus planes personales o profesionales para dedicar este tiempo a atender y suplir todas las necesidades del bebé”, agrega.