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PSICOLOGÍA A SU ALCANCE

Vivir es bueno

Vivimos tan agitados que los días parecen correr velozmente, empero, siguen siendo de 24 horas. Aun así, el tiempo no alcanza para desarrollar lo programado y nos cuestionamos: ¿Qué está pasando? Sentimos cansancio y en este tenor termina el día para proseguir al siguiente con lo no concluido, pues las horas parecen ser más cortas.

Falta tiempo para dormir, compartir con los hijos, la pareja, la familia, los amigos, para asistir a actividades... en fin, no hay tiempo, por lo que al tener que dividirnos en pedacitos, solo conseguimos estresarnos y agotarnos.

Necesitamos vacaciones para apartarnos y dedicarnos un poco a nosotros mismos. Pero acontece que al tomar esas vacaciones enfrentamos la situación de que al no estar en el afán diario nos aburrimos, a causa de no saber hacer buen uso del tiempo libre.

Haz un alto, respira y piensa que el día de la muerte llegará y nos sorprenderá quizás haciendo un montón de cosas o quizás haciendo nada, pero llegará, por lo que no esperes tener tiempo para sentarte y meditar un segundo en que la vida es regalo divino y hay que disfrutarla.

Aunque estés muy ocupado, dedica un segundo a buscar la parte bonita de cuantas cosas realizas y de cada persona con las que compartes para así apreciar lo pequeño y lo grande que tienes, y saborearlas. No sigas luchando con los obstáculos cotidianos, pues te impedirán ver que las rosas de tu jardín son las más bellas, así que disfruta compartir con los tuyos, el desorden que los hijos dejan en casa, el amanecer, saca provecho a las discusiones, deléitate con tu trabajo, pues te brinda sobrevivencia, y este conjunto de cosas te permitirán avanzar y desarrollar todo tu potencial porque a pesar de todo, es bueno vivir.

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