Dice privilegios a reclusos no pueden sobrepasar la ley

República Dominicana no puede conceder a los internos ningún tipo de beneficios fuera de los que confiere el nuevo Modelo Penitenciario Dominicano, más cuando esto está establecido en un memorándum de entendimiento firmado entre el país y el Sistema de Derecho y Obligaciones de la Organización de las Naciones Unidas para las personas privadas de libertad, dijo Roberto Santana, director de la Academia Regional Penitenciaria.

Esto comprometió al país a mantener intacto ese modelo penitenciario, sin variarle nada, porque además está contenido en varias normativas de la ONU, por lo que el país tiene que mantener dichos centros penitenciarios exentos de violaciones a los Derechos Humanos, de sobrepoblación carcelaria, de corrupción y de privilegios, según precisó Santana. Respecto a los siete implicados en el caso de los sobornos de Odebrech que serían transferidos a la prisión de Najayo, Santana dijo que espera que la iniciativa figure en lo permitido en las reglas de la ONU y del nuevo modelo.

“Según he tenido conocimiento hasta ahora, y espero que sea así, lo que se está tratando de hacer es habilitar un área para siete celdas pues el nuevo modelo en todos sus centros, como se sabe, segrega, aísla a las personas que tienen un perfil de peligrosidad, de alta notoriedad o de alto riesgo, los separa del resto de los privados de libertad”, apuntó. “Si ellos fueran 20 y no cupieran en ese espacio para siete, habría que ubicar un pabellón de 20 donde quepan sólo ellos, sin otros internos”, precisó.

Dijo que se trata de un protocolo exitoso aplicado por 13 años en el Nuevo Modelo Penitenciario dominicano y avalado por la experiencia internacional y que tiene la finalidad múltiple de evitar que se atente contra la integridad de los imputados, y a su vez impedir que esas personas influyentes puedan manipular a los demás privados de libertad, traten de tomar el control del recinto ofreciendo prebendas a la mayoría de los internos que son personas pobres y con grandes necesidades materiales, creando un clima de corrupción e indisciplina a la vez que le arrebatan el control a las autoridades legítimas del Centro, tal y como ocurre en las prisiones tradicionales que aún quedan.

Santana puso de ejemplo a los implicados en el caso Figueroa Agosto, quienes fueron recluidos en un pabellón en el Centro del Modelo Penitenciario en San Pedro de Macorís, porque si los dejaban junto a 500 presos aprovechaban la oportunidad para utilizar a los demás reclusos y continuar cometiendo otros delitos y terminaban controlando el Centro.

“Estas personas del caso de los sobornos de Odebrecht son personas de alta notoriedad pública, que si alguien quisiera hacerle daño se aprovechará de tenerlos cerca, tal y como he advertido con la arriesgada e inexplicable recomendación de trasladar a Rondón a la Victoria. Si él confía ingenuamente en todo lo que le hayan prometido sobre su seguridad ahí, lo lamentará, y le país también perderá ”.

Comida y medicamentos Según se conoció, presos como los del caso Odebrecht no deben asistir al comedor común junto con los demás internos, ni a la biblioteca; los libros que leen se los llevan a su celda, los medicamentos que les recetan los médicos son administrados por el personal de la cárcel, igual que la comida, para evitar que sean envenenados o que ellos mismos atenten contra sus vidas.

(+) LA VIDA EN EL NUEVO MODELO De igual forma, en los centros penitenciarios del nuevo modelo, los internos tienen derecho a un televisor por área, y libros, pero los libros que determine el centro de su propia biblioteca y un lugar donde comer, esto incluye a los internos de áreas segregadas de los demás internos.

Santana considera que todo lo que se le permita fuera de esos derechos y los estándares establecidos, serían privilegios ilegales e inaceptables, algo que entiende que el nuevo modelo penitenciario no hará ni aceptará, “porque se desacreditaría y desacreditaría al país”. “Pienso que este momento puede ser propicio para que el Patronato Nacional Penitenciario anime nuevamente al gobierno para que haga las cosas bien en este tema y que el nuevo modelo penitenciario no vuelva atrás; el patronato es un contrapeso civil del Estado que ayuda para que la sociedad pueda confiar en que el nuevo modelo se mantendrá y la reforma penitenciaria llegará a su fin por la vía de la sustitución de La Victoria, como felizmente anunció el presidente Medina hace varios meses”, dijo Santana.

Concluyó en que República Dominicana no está sola en el mundo y que tiene que sujetarse a unos términos internacionales en el cumplimiento del Nuevo Modelo Penitenciario.