Habitantes tratan de rehacer vida

Los habitantes de esta provincia tratan de volver a la normalidad tras los daños que dejaron los recientes aguaceros.

En las comunidades Enriquillo, El Higueral, El Naranjal, Polo, Arroyo Dulce, El Mamonal, La Cañada de Popei, Los Guandules y Los Solares, los residentes aun tienen en sus patios los restos de las inundaciones, lo que les impide hacer una vida normal.

Aunque no se registraron lluvias de importancia en esta provincia, ayer el Arroyo Palomino continuaba llenando de agua varios sectores.

Una de las situaciones que más afecta esta provincia es que los productos se están dañando en las fincas porque los agricultores no tienen como sacarlos.

A principios de mayo, más de 9,090 desplazados resultó ser el saldo dejado por las inundaciones provocadas por aguaceros que afectaron gran parte del país. El gobernador de aquí, Pedro Peña Rubio, informó que en la mayoría de los caminos vecinales que sufrieron daño apenas se han podido quitar los escombros.

Lo mismo sucede con las carreteras, y esta situación dificulta el traslado de los productos.

Indicó que para que Barahona se recupere, hay que rehacer las obras que las inundaciones destrozaron; no obstante, como no se ha declarado en emergencia, hay que llamar a licitación para la ejecución de las construcciones.

Para paliar la situación de las familias que sufren, los Comedores Económicos mantienen operativos de entrega de alimentos crudos y cocidos, hasta tanto la familia tenga la capacidad de buscarlo.

Esa entidad a diario entrega 10,000 raciones cocidas. Solo ayer, además de esa ración diaria, entregaron 5,000 raciones crudas.