Presidente TSE destaca rol entidades de la sociedad civil

El presidente del Tribunal Superior Electoral (TSE), Mariano Rodríguez Rijo, valoró el interés de las organizaciones de la sociedad civil por conocer más fondo la dinámica y el funcionamiento de ese órgano constitucional, como jurisdicción especializada en materia contenciosa electoral.

Rodríguez Rijo afirmó que la existencia de una sociedad civil diferenciada de la sociedad política es un prerrequisito para la democracia, y que sin ella no hay Estado legítimo.

En ese sentido, añadió que fueron “positivas” y “oportunas” las visitas que recientemente realizaron Participación Ciudadana (PC) y la Asociación Nacional de Jóvenes empresarios (ANJE), con los fines de constatar cómo ejerce el Tribunal sus atribuciones constitucionales de conocimiento, juzgamiento y decisión de los conflictos políticos electorales.

Dijo que hace unos días participó en un conversatorio con los miembros directivos de ANJE, luego que ellos expresarán interés en conocer asuntos concernientes al desarrollo, organización y decisiones del TSE en sus cuatro años de funcionamiento, y otros temas sobre el sistema electoral del país”, recordó.

Dijo que los jueces del TSE ven con satisfacción el interés de estas entidades de la sociedad civil, que, por un lado, definen y defienden los derechos individuales, políticos y sociales de los ciudadanos y, por el otro, propician su libre asociación y la posibilidad de defenderse de la acción estratégica del poder político y del mercado.

Con respecto a Participación Ciudadana elogió su iniciativa de ampliar su labor de observación electoral hacia el Tribunal, y dijo que la misma se inscribe dentro de la tendencia que se registra en América Latina de que la observación electoral no se limite sólo a los organismos administrativos electorales sino también a los jurisdiccionales.

Rodríguez Rijo señaló que ANJE es una entidad formada por jóvenes empresarios emprendedores y valiosos, y que con ellos trató temas concernientes a la historia electoral dominicana, y a la calidad de la formación política y humana de los dirigentes y candidatos, que estaba de acuerdo con sus planteamientos sobre la necesidad de que se realicen debates políticos.