Biblioteca Nacional avanza con la tecnología

La necesidad de estar a la par con la nueva era de la información del siglo XXI hizo que la Biblioteca Nacional abandonara su sede en el 2007 y se estableciera en un mediano local ubicado en la avenida Luperón. Esperar media década por la reconstrucción de su raíz fue su gran reto, periodo de perseverancia que actualmente la coloca entre las bibliotecas más modernas, equipadas y organizadas del país.

Lo que antes representaba debilidades para el principal Centro Bibliográfico del país, como la organización de sus tomos, la búsqueda rápida de título, el acceso instantáneo a internet y espacio para los investigadores, actualmente son las fortalezas de la Biblioteca Nacional.

Con una modificación que duplicó su antiguo terreno y una inversión de más de mil 200 millones de pesos, la Biblioteca Nacional cumple con todos los estándares internacionales de esta época.

Este Patrimonio Bibliográfico tiene la misión de poder cumplir con preservar y reunir toda la herencia del país, con el único objetivo de mantenerlo y difundirlo nacional e internacionalmente.

Acorde al siglo XXI El director general de la Biblioteca Nacional Pedro Henríquez Ureña (BNPHU), Diomedes Núñez Polanco, comenta que la gran tecnología que posee el centro cultural que dirige es segura y ayuda a fortalecer las actividades que se realizan diariamente.

“Las tecnologías que tenemos son tan seguras que compiten con los bancos y las telefónicas del país. Además, contamos con un Software que es el Aleph 500, el cual es el que usan las grandes bibliotecas del mundo, como la universidad por excelencia de Estados Unidos, Harvard”, asegura.

Aclara que la tecnología que posee la biblioteca no solo tiene que ver con la rapidez del internet, el cual cubre unos 40 metros, sino que también han avanzado con sus catálogos, la rapidez de las búsquedas de títulos y la organización de ellos.

“Contamos con la especialidad de que si en una búsqueda que realiza cualquier usuario no encuentra lo que busca en nuestra biblioteca, el buscador los transfiere a una biblioteca internacional que tenga el mismo software y ubica lo que busca”, resalta.

El encargado de tecnología de la Biblioteca Nacional, Fernelis Hernández, asegura que cuentan con una de las plataformas tecnológicas más robustas del mercado.

“El 80 por ciento de los equipos que tenemos son totalmente terminales, lo que representa un bajo consumo increíble, es como si fuera una bombilla eléctrica”, explica. Comenta que tienen tres tipos de conexión, una para la parte administrativa, otra para los servicios y la de acceso libre.

Dice que los avances también se han expandido en las áreas telefónicas con las que cuentan, la cual es una de las más actualizada del mercado.

Maricela Molina, bibliotecaria y encargada de Áreas Técnicas, explica las novedades en la biblioteca para poder realizar el proceso de digitalización de libros y que usuarios los puedan ubicar a través de las computadoras que poseen.

“Nosotros tenemos una gran cantidad de nuestros libros digitalizados. Pero también está el formato papel porque si una persona está investigando de manera retrospectiva lo que se va a encontrar en su mayoría estará en formato impreso y esa sería la manera de consultar”, dice.

Explica que al momento de buscar los libros digitalizados, si se trata de autores contemporáneos no se les puede escanear completamente debido a la gran demanda que tienen, pero sí les dan el servicio de digitalización del documento que necesite consultar.

“Después previamente en su casa o donde desee consultarlo, ese documento se le puede mandar vía correo electrónico si lo solicitan”, expresa Molina. Destaca que actualmente están procesando las obras dominicanas más antiguas y otras que son las más solicitadas por los usuarios.

Puntualiza que cuando algunos de los consumidores no tiene tiempo para dirigirse a la biblioteca, los contactan y les plantean lo que necesitan. Los encargados de esa área les envían una bibliografía orientada en el tema que buscan, y así el beneficiario lo puede preservar.

“Además de nosotros realizar el proceso de digitalización, también hemos apoyado otras instituciones en ese proceso”, dice.

Además, cuenta que debido a su alta tecnología en todas las áreas, los usuarios que los contactan vía correo electrónico o por telefónico, se les brinden servicios muy puntuales por un personal capacitado.

“A veces hay beneficiarios que necesitan un solo dato y no quieren venir por eso, entonces llaman y les damos esa información por teléfono o vía correo electrónico”, resalta.

Además de eso, dice que cuentan con una sala de lectura, donde los usuarios pueden ir con sus materiales y durar el tiempo que necesiten en la biblioteca, pueden llevar su computadora y acceder a la red inalámbrica que tienen.

Actividades La coordinadora de Gestión Cultural, Carmen Rosa Estrada, comenta que en el marco de la misión de la biblioteca, tienen una unidad de gestión cultural cuya función es difundir a través de conferencias y encuentros con escritores dominicanos el Patrimonio Bibliográfico de la nación.

“Nosotros invitamos a un público en general, como estudiantes, comunicadores, bibliotecarios, educadores y escritores. Esta es una forma que nos ha dado resultado para poder difundir lo que es de nosotros”, manifiesta. Aclara que el objetivo de esas actividades es que la población se acerque a la literatura.

(+) LOS GRANDES RETOS El director de la Biblioteca Nacional, Diómedes Núñez Polanco dice estar consciente de todas las precariedades qiue tienen las bibliotecas públicas en el país, por lo que uno de sus principales retos es ofrecer modalidades que sean amigables para la juventud y los nuevos lectores, para que esa cultura no se pierda.

“Creo que de eso se trata, además, en la educación a nivel mundial hay una crisis de formación, pero por lo menos aquí, nosotros, a través de pactos educativos estamos trabaajndo en elevar esa formación”, dijo.

De su lado la coordinadora de la Red de Bibliotecas Públicas, Célida Álvarez, expresa que en torno a las precariedades que presentan la mayoría de las bibliotecas en los pueblos, en el censo del 2010 se comenzó a desarrollar un programa de acciones que buscan involucrar a las entidades competendes para que brinden su ayuda en cada caso.

Dijo que a esas bibliotecas se les ha apoyado con donación de libros, capacitación de personal y se les ha orientado para que logren sensibilizar a los ayuntamientos a partir de convenios que se han firmado para recuperar su funcionabilidad y la integración de jóvenes a la lectura.

Diómedes Núñez, director del Patrimonio Bibliográfico del país, recomienda a los jóvenes que lean y se integren a talleres de lectura.

“Que vean la educación como parte de su formación, como placer y forma de disfrutar, porque a través de la lectura pueden vivir sus vidas y conocer otras”, aseguró el funcionario.