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POP CON EL SWING LATINO

Con imponente montaje Ricky Martin ofrece su concierto “One World Tour”

RICKY MARTIN APARECIÓ EN EL ESCENARIO BAJANDO EN LA ESPECTACULAR TARIMA CARGADA DE CUATRO PANTALLAS DE LED Y LUCES

foto: activao.com

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Ricky Martin regresó a República Dominicana con su “One World Tour”, un espectáculo que no dio tregua a la audiencia que quiso acompañarlo al anfiteatro de Altos de Chavón ayer.

Con imponente montaje, hubo que tomar parte del escenario, para dar espacio al cuerpo de ocho bailarines, de ambos sexos, y una banda de igual número de de músicos, que acompañaron al cantante boricua.

El artista, nacido en San Juan, Puerto Rico, hace 44 años, se reunió con sus seguidores dominicanos luego de hacer pública su condición de homosexual, presentó un show en el que mostró su lado más agresivo, en cuanto a manejo escénico se refiere, y al mismo tiempo reafirmó que es un artista que está a medio camino entre lo latino y lo anglo.

Esto no solo por el hecho de que gran parte de su repertorio es en inglés, sino por el formato del espectáculo, en el que hubo muchos segmentos, cada uno con su vestuario (Ricky se cambió de ropa unas ocho veces) y en el que cada canción tuvo su historia en el escenario.

Ricky Martin apareció bajando en la espectacular tarima cargada de cuatro pantallas de led y luces, vestido elegantemente con un traje negro, cantando “Mr. Put It Down”, que originalmente grabó con Pitbull. A este tema, con aires de funk, le siguieron “This Is Good” y “Drop It on Me / Shake Your Bon-Bon”, que arrancó los primeros gritos por ser conocida por la audiencia, y por supuesto, “Livin’ la Vida Loca”, en la que apareció subido en un clásisco Ford Mustang de 1965.

“Quiero que nos olvidemos de todos los problemas aquí en Republica Dominicana”, dijo Ricky al saludar al público que llenó el escenario de piedra y recibió con agrado cada una de las partes del show.

La belleza de los bailarines, tanto femeninos como masculinos se puso de manifiesto en el transcurso del espectáculo, y si las primeras salieron en ocasiones en una atrevida ropa interior, los segundos se lucieron al aparecer en falda y con el torso desnudo. El mismo Ricky Martin se paseó después con una de estas elegantes faldas para hacer la canción “It’s Alright”.

Luego de varios temas movidos, llegó la calma, con baladas como “Asignatura pendiente”, “Disparo al corazón”, “Tu recuerdo” y “Vuelve”.

Pero el movimiento regresó ya en la parte final del concierto para hacer un remix con “Lola, Lola”, “María”, y el merengue urbano “La mordidita”. Al hacer “Por arriba, por abajo”, de su disco “Vuelve”, de 1998, puso a todos a mover los brazos de un lado a otro, al tiempo que repetían la provocadora frase: “Que me importa el qué dirán”.

El concierto cerró con una nota alta en la que tanto artistas como el público se encontraban en la mayor excitación con “Cup of Life”, la versión anglo de su popular tema “La copa de la vida”.

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