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NAM, hogar que empodera

Yara Rodríguez (nombre ficticio) es diestra en la cocina y muy activa en las capacitaciones. En los talleres del Núcleo de Apoyo a la Mujer (NAM) sirve meriendas sabrosas decoradas con esmero admirable.

Es parte de la Red Mujeres Empoderadas Abriendo Caminos, integrada por sobrevivientes de violencia basada en género. Ya sonríe con frecuencia y sus ojos superaron la honda tristeza de saberse atacada por el padre de su hijo, quien al herirla la rozó cruelmente con la muerte.

En el NAM Yara halló un hogar solidario, así como la fuerza e instrucción para vencer el círculo de violencia.

Como ella, cientos de mujeres en los casi 30 años de la institución, han avanzado hacia el empoderamiento, dejando en el pasado la ruta crítica del aislamiento, la subordinación, persecución y el maltrato por el hecho de ser mujeres.

Físicamente, el Núcleo de Apoyo a la Mujer (NAM), fundado en 1987, es un domicilio instalado en un segundo piso del sector Los Pepines en Santiago.

Agenda NAM NAM cubre todos los derechos de las mujeres como son : sexuales y reproductivos.

SERVICIOS DEL NAM Las mujeres reciben orientación y apoyo en audiencias sean penales o civiles, para ellas y sus menores a cargo. Y se les ofrece la oportunidad de terapias grupales compartidas con otras mujeres que están ya en el nivel de sobrevivientes, informa Pola.

RELACIÓN Y CONFORT El día a día, el NAM es el lugar donde las mujeres víctimas de agresiones reciben apoyo inmediato.

En palabras de la fundadora Susi Pola, el Núcleo “es un sitio especial para las mujeres. Ssobrevivientes de violencia basada en el género.

Nuestras sicólogas están capacitadas especialmente, tienen experiencia en contener a estas víctimas y en empoderarlas para sus procesos legales, si decidieran emprenderlos”.

Quien ama no maltrata S“Sabías que el feminicidio no es un crimen pasional, no es la muerte por amor”, reza un cartel en la recepción de la institución. Justamente contra el feminicidio (el último escalón en la violencia ejercida contra la mujer) se lucha también desde el NAM a través de labores de prevención de la violencia intrafamiliar y contra la mujer, realizando acciones de incidencia política ante el Estado, para que asuma su rol de garantista de los derechos humanos de las mujeres en sus diferentes ciclos de vida, así como coordinando acciones con otras instancias para ofrecer apoyo integral a las mujeres que buscan ayuda por la violencia que viven.

La psicóloga Xiomara García, quien funge como coordinadora del proyecto que forma redes en las comunidades, profesionales del sistema de atención y mujeres sobrevivientes de violencia de género, manifiesta que trabajar en el NAM ha sido “una oportunidad para mi transformación personal y profesional”. A su juicio, es indescriptible sentir la satisfacción de ser un eslabón en la ruta que viven las mujeres maltratadas, contribuyendo a su cambio de vida. “Es un privilegio formar parte de una institución que rompe paradigmas tradicionales de sometimiento, y poder contribuir para que pasen de ser víctimas a ser mujeres empoderadas”, afirma Xiomara.

La trabajadora social, Mildred Dolores Mata, lleva el Núcleo en su alma y voz. Con mucha satisfacción cita que el NAM también ha facilitado capacitaciones, sensibilización a hombres y ha propiciado la formación de grupos “Hombres en Reflexión contra la violencia Masculina”, y ®Por una Masculinidad sin violencia®.

Erradicar la cultura del látigo y la discriminación que condena a la tumba a miles de mujeres, se asume desde el NAM con la educación y la asistencia inmediata y solidaria. “Muchas de las capacitaciones aunque enfocan la superación de la violencia de género hacia la mujer, han estado dirigidas a mejorar la calidad de los servicios y la empatía del personal, y han sido públicos mixtos los beneficiados como el Ministerio Público, jueces, juezas, la Policía Nacional”, establece Mildred Mata.

En el NAM, Mildred se siente útil y orgullosa. “Hemos crecido en unidad durante tantos años, respetando nuestras diferencias y limitaciones. ”

MOVIMIENTO MOVIDA La institución fue el nido que albergó y alimentó las raíces del Movimiento Vida sin Violencia (MOVIDA), red municipal que integran entidades de la sociedad civil e instituciones del Estado (Ayuntamiento, Ministerio de la Mujer a través de la Oficina Provincial de la Mujer (OPM), Fiscalía de Santiago, CONANI, Tribunal de Niñas/ Niños, Salud Pública) que trabajan con las mujeres. A juicio de Susi Pola, desde 1994, MOVIDA informa, forma, da seguimiento a sistema de atención y hace esfuerzos por mejorarlo y mantener al día los aportes.

El NAM organiza Redes Comunitarias para impartir talleres en varios sectores de Santiago.

En palabras de Mildred Mata, en MOVIDA a pesar de las diferencias, se hizo un hábito la consulta y la unidad. Su membresía de unas 18 mujeres y un hombre es proactiva y desinteresada. El elitismo no predomina, el liderazgo es variado y hay una comunicación horizontal.

En la entidad, se mantiene firme para que el panorama y los servicios mejoren.

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