El ocaso de José Reyes

Al ser recientemente colocado en lista de renuncia por parte de los Rockies, después de pasar por la de asignación sin ser reclamado, se acentuó lo que se había hecho evidente, el descenso del valor de José Reyes en el béisbol de Grandes Ligas.

Esto se inició en el curso de este decenio y aunque muchos entienden que aún le quedan condiciones para ser útil a equipos con necesidades puntuales, estas no serían en función de torpedero y son nulas las posibilidades de que pueda aportar logros similares a los conseguidos en el pasado con su astuto y veloz desplazamiento en las almohadillas.

No obstante, puede ser un estímulo que lo mantenga en actitud positiva alcanzar objetivos muy precisos. Disparar 96 hits que lo lleven a totalizar dos mil y estafarse 21 almohadillas con las que alcance quinientas y pase a ocupar un lugar en el exclusivo cuadro de los que han combinado dos mil incogibles y quinientas bases robadas en sus carreras, al que recientemente llegó su miembro número 21, Ichiro Suzuki.

AÑOS DE ESPLENDOR El impacto que José Reyes causó al arribar a las Grandes Ligas con los Mets en la segunda parte del primer decenio de este siglo, fue causado mayormente por la velocidad que generaba. Los resultados producidos en virtud de esa habilidad fueron históricos. Entre el 2005 y el 2008 anotó 453 carreras, un promedio de 113 al año, conectó 68 batazos de triple mérito, porcentaje de 17 por estación y se robó 258 bases con una media de éxito de 79% y un promedio de 65 por año. Esas cifras permiten afirmar sin temor, que en esa etapa de su carrera José Reyes alcanzó los mejores éxitos ofensivos de jugador alguno en la historia moderna de las Ligas Mayores, sobre la base principal de la rapidez con que corría en las bases.

La continuación de esta formidable contribución se interrumpió en el 2009 cuando una lesión lo limitó a participar en apenas 36 juegos, al retornar, no volvió a conseguir números semejantes a los iniciales, aún cuando en 2011 tuvo destellos parecidos incluyendo un título en promedio de bateo.

JUEGO DEFENSIVO Considerado un defensor con limitaciones en el campo corto, realmente las estadísticas así lo indican, cabe señalar que en los inicios de su carrera Reyes exhibía buenas condiciones en ese aspecto. Entre el 2006 y el 2008 logró sumas de élite en los principales renglones de los registros de última generación que miden la defensa, cosa que sufrió un cambio negativo a partir del 2009 cuando retornó de la lesión indicada. El problema físico no solo mermó sus destrezas defensivas, sino también las ofensivas, aún cuando en ese apuntado 2011 alcanzó alguna recuperación que le permitieron elevar su valor en el mercado de la agencia libre al que entró al final de ese año.

Los logros obtenidos con su tipo de juego a partir de 2012, primero con los Marlins y luego con los Azulejos, estuvieron muy alejados a los que había enseñado con los Mets en su etapa de plenitud. En el 2013 sufrió otra seria lesión al fracturarse un tobillo que lo sacó de juego por dos meses y el año pasado fue sorpresivamente negociado a los Rockies por Troy Tulowitzki, en un movimiento que demostró la perentoria necesidad de los Azulejos de reforzar el campo corto para concretar sus aspiraciones de obtener el banderín de su división.

Con 33 años de edad, el futuro inmediato despejará las dudas que han surgido en torno a la figura de José Reyes.

PICADERA.-Con 117 triples disparados en su carrera, José Reyes encabeza los dominicanos en ese renglón. Solo él y Juan Samuel que conectó 102 han pasado del centenar......El único dominicano en el cuadro de los que han combinado disparar dos mil hits y estafarse quinientas bases es César Cedeño. Alcanzó 2,087 incogibles y se robó 550 almohadillas...Las 78 bases robadas logradas por José Reyes en 2007 son la cifra máxima de los últimos 25 años. Marquis Grissom se estafó también 78 en 1992....