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TRIBUNA ABIERTA

Tarea pendiente, Matos Berrido

Ya estamos en la antesala del Campeonato de Béisbol Profesional de la República Dominicana 2015-2016, sin que la Liga de Béisbol, los seis equipos que la conforman, el Comisionado de Béisbol del Caribe ni el Comisionado de Béisbol Profesional del país y la Federación de Peloteros, hayan tomado posición alguna, que se conozca, en torno a la partida de jugadores hacia las ligas profesionales de Japón y Corea justo cuando se desarrolla el campeonato otoño-invernal local.

Las instituciones, sean públicas o privadas, se consolidan y se hacen fuertes en la medida que legislan para determinar su marco de acción y aplican medidas para resguardarse.

En los últimos tiempos, el fanático de béisbol dominicano y de otras ligas del Caribe observan impotentes cómo cada año sus mejores jugadores abandonan sus respectivos equipos para ir a militar en las ligas del lejano oriente.

Son muchos y sonoros los casos, pero nos limitaremos a citar cuatro peloteros que en sus momentos eran los mejores, no sólo de sus equipos, sino de la Liga Dominicana: Mauro Gómez (Escogido), Yamaico Navarro y Jairo Asencio (Licey) y Héctor Luna (Águilas). Todos los equipos han sufrido importantísimas bajas por el mismo concepto, es decir, que sus jugadores son firmados para las ligas de Japón o Corea y abandonan el torneo local sin que medie ningún tipo de trámite o impedimento.

Creemos que la Liga y los equipos tienen esa tarea pendiente, porque ya el problema no resiste que lo posterguen. Es un cáncer que se debe extirpar de inmediato, por lo menos, hacer el intento.

Para comenzar, la Liga debe exigir a los equipos claridad en la firma de contratos con sus jugadores, de modo que si una de las partes no cumple con sus cláusulas, inmediatamente sea llevado a los tribunales ordinarios o le sean aplicadas las sanciones contempladas para esos casos por la propia Liga. Esas sanciones deben ser ejemplarizadoras, no simples multas, sino de expulsión incluso.

Tienen que ser medidas extremistas, pero decisivas, como aquellas que aplica Major League Baseball a los jugadores que apuestan en el béisbol.

Y no tocamos lo relativo al béisbol organizado de los Estados Unidos y lo que los diferentes equipos hacen con los jugadores latinos, debido a que cuando un joven firma pasa inmediatamente a ser de su propiedad, es decir, que los jugadores son propiedad de las organizaciones del béisbol profesional y no de los equipos invernales como erróneamente muchos pueden creer.

Sobre ese caso entendemos que sólo la unión de los países afectados (México, Venezuela, Puerto Rico, República Dominicana) podría en el futuro lograr algunos resultados positivos para las ligas invernales.

Mientras tanto, estos países caribeños tienen que enfrentar con inteligencia la problemática con Japón y Corea, que sí luce estar a su alcance.

Sin dudas, doctor Leonardo Matos Berrido, que la Liga de Béisbol que usted dirige tiene esa tarea pendiente y nadie más indicado que usted para tratar de encontrarle solución.

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