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“Buenos Días” nos dice adios

El pasado lunes, el matutino “El Día” exhibió una portada negra, para lo que fue, sin dudas, un lunes negro. Varias de sus páginas dedicadas en honor a quien fuera su director y uno de los profesionales del periodismo más íntegros y valorados que conocemos.

Don Rafaelito, el paladín de la libertad de prensa, no perdió un minuto de su vida, al contrario, la vivió intensamente con la prudencia que los tiempos imponían.

Nos deleitó durante varias décadas con sus escritos a través de la columna “Buenos Días”, breves pero profundas, las cuales lograron trascender las fronteras del periódico para convertirse en material compartido por WhatsApp y redes diariamente.

Crítico profundo de nuestras debilidades y dolencias como nación, lo hizo siempre apelando a la reflexión, al cambio, al recto andar. Con un sentido riguroso al respeto y racionalidad, y muy a pesar de la situación que se viviese en el momento, logró impregnar en cada uno, su toque de esperanza, siendo su primera apuesta la humanidad.

Dignificó y elevó el sentido de patria, familia y valores, abanderado de manera obsesiva a la honestidad y al trabajo, acompañado de un fino humor para atenuar la vida de tristeza, decepciones y sacrificios.

Fue un hombre de altísimas cualidades intelectuales y de una cultura humanista extraordinaria a la vez, una persona humilde, sincera, simpática y decididamente optimista. Tras su suave y tenue voz, apariencia débil y corta estatura, su sentido del humor fino y característico, su paciencia y capacidad de escucha, se escondía un noble dominicano baluarte de principios éticos inquebrantables.

Su constancia y entrega al trabajo inapelable. A pesar de los años a cuesta, Don Rafaelito nunca abandonó el oficio que lo acompañó hasta el día de su muerte, por lo que se rumora que dejó una columna a media talla. Escribir era más que un desahogo, sino una pasión que lo mantuvo firme hasta el último suspiro.

Marco la diferencia en el ámbito profesional y personal, por lo que faltaran palabras y sobraran adjetivos para exaltar la vida y obra de Don Rafaelito.

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